Thursday, February 16, 2023

Nicaragua: Dictador Ortega retira nacionalidad a otras 94 personas, entre ellas el obispo Silvio Báez


Información de agencia EFE, Feb-16-2023.

Tegucigalpa, 16 feb (EFE).- El obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua, Silvio José Báez Ortega, quien se convirtió en el segundo miembro de la Conferencia Episcopal de Nicaragua a quien las autoridades judiciales de su país le retiran la nacionalidad, agradeció este jueves a Dios por ser nicaragüense.

“¡Dios de la vida y de la liberación! Te doy gracias por ser nicaragüense”, exclamó en Twitter el influyente obispo, que se encuentra fuera de Nicaragua desde hace cuatro años por decisión del papa Francisco por motivos de seguridad.

Ser nicaragüense es “un orgullo que nadie jamás podrá arrebatarme”, agregó Báez, un férreo crítico del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y que ahora reside en Estados Unidos.

“Te pido que nos guíes en el camino hacia la liberación de nuestro país, en donde el pueblo es oprimido y tu santa Iglesia perseguida. Por Cristo, nuestro Señor”, exhortó el religioso en su publicación, en la que compartió un arte en la que una mano alza la bandera de Nicaragua, con un mensaje al lado: “¡Un pueblo crucificado, siempre resucitará!”.

OBISPO BÁEZ: SON CRIMINALES

Las autoridades de Nicaragua despojaron el miércoles de su nacionalidad a otros 94 nicaragüenses, con lo que suman 317 en la última semana, incluido el obispo Rolando Álvarez, condenado a más de 26 años de prisión tras negarse a ser desterrado por el Gobierno de Ortega a territorio estadounidense.

También están los 222 presos políticos que fueron excarcelados y expulsados hacia Estados Unidos el 9 de febrero pasado, incluido 11 religiosos.

En la nueva lista de 94 nicaragüenses declarados apátridas sobresalen el obispo Báez, así como los escritores Sergio Ramírez y Gioconda Belli.

El pasado 12 de febrero, durante su homilía, Báez calificó de “criminales” a quienes atentan contra la libertad de las personas inocentes, denigran su dignidad con falsedades, se ensañan para humillarlas, las tratan con crueldad y las condenan injustamente, en referencia al obispo Álvarez y a los 222 presos desterrados.

“Son criminales quienes llevan a la cárcel a personas justas y quienes destierran a los ciudadanos de su propio país”, señaló el obispo carmelita.

“Estos actos abominables no son solo caprichos de gente desquiciada, irregularidades jurídicas o incumplimiento de normas internacionales, no. Ofender con rabia, difamar por venganza, encarcelar injustamente, torturar con saña y condenar al destierro son auténticos crímenes y quienes actúan de este modo son criminales, que deberán comparecer ante la justicia tarde o temprano”, apostilló.

SACERDOTE: NO VENDO LA SOBERANÍA A LOS RUSOS NI A LOS CHINOS

El obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Managua encabeza la lista de religiosos, entre los 94 nicaragüenses despojados de su nacionalidad, que incluye a los sacerdotes Edwin Román -sobrino del héroe nacional Augusto C. Sandino-, Harving Padilla y Uriel Vallejos.

“Soy orgullosamente nicaragüense. Se equivocan los dictadores de Nicaragua, Rosario Murillo y Daniel Ortega, que me despojan de mi nacionalidad con un vulgar escrito”, reaccionó el párroco Román, también exiliado en EE.UU, en Twitter.

“Yo no entrego ni vendo la soberanía de mi país ni a los rusos ni a los chinos. Volveré en libertad”, añadió el sacerdote, que publicó una foto suya en la que aparece ataviado con una camisa de colores azul y blanco, los de la bandera de Nicaragua, y la leyenda “NICA”.

En cambio el presbítero exiliado Vallejos parafraseó en un mensaje la canción “Nicaragua Mía”, cuya letra dice: “Soy puro pinolero, nicaragüense por gracias de Dios” y agregó: “Viva Nicaragua libre”.

Nicaragua atraviesa una crisis política y social desde abril de 2018, que se acentuó tras las controvertidas elecciones generales del 7 de noviembre de 2021, en las que Ortega fue reelegido para un quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto con su esposa, Rosario Murillo, como vicepresidenta, con sus principales contendientes en prisión o en el exilio.

Cardenal Toribio Ticona internado tras accidente doméstico que le fracturó tres costillas


Esta es una información de El Diario, Feb-16-2022.

Cardenal Toribio Ticona internado por una caída

16/02/2023


Tras sufrir una caída y, consecuencia de ello fracturas en costillas, el cardenal Toribio Ticona permanece internado en el Hospital Arco Iris de La Paz. De acuerdo con el reporte médico, el sacerdote se encuentra estable y bajo observación.

Al parecer, el cardenal sufrió un accidente doméstico cuando el pasado lunes cayó de su cama al levantarse y recién el martes, se percató que tenía fracturadas tres costillas izquierdas, por lo que fue trasladado al nosocomio.

“Le hemos traído al hospital Obrero y luego fue transferido al hospital Arco Iris, ahora se hizo todos los análisis preliminares y se tiene que hacer más valoraciones; en este momento el Cardenal está estable”, explicó el secretario del Cardenal, padre Pablo Ponce, a un medio televisivo.

Apuntó que la máxima autoridad de la Iglesia Católica en Bolivia, rechazó ir a un hospital el día que sufrió el accidente y prefirió guardar reposo, pero los dolores empeoraron y ya no pudo resistirlos.

El papa Francisco designó a Ticona como nuevo Cardenal boliviano en mayo de 2018 y se constituyó en el primer Cardenal boliviano de origen indígena. El 28 de junio de ese mismo año recibió ese honor de la Iglesia Católica.

En enero de 2022, dio positivo a covid-19, por lo que fue internado en un centro de salud.

No podía ser de otra manera, el compañero Evo se ha solidarizado con Ticona.

“Creo que el ministerio del Papa es ad vitam”, Francisco abandona la idea del papado breve...¡y de renunciar!


Todavía recordamos aquellas ocasiones al principio del pontificado de Francisco cuando pronosticaba un papado breve, como en el viaje de regreso de Corea a Roma y en la primera entrevista que le concedió a Valentina Alazraki; “tres o cuatro años”, decía Francisco sobre la duración de su Pontificado, al tiempo que sugería también que renunciaría. Eso parece haber cambiado, vamos en el año diez y a punto de entrar al once, ni papado breve ni renuncia en el horizonte. En las conversaciones con los jesuitas en su reciente viaje a Congo y Sudán del Sur, que como siempre ha publicado en exclusiva Spadaro en La Civiltà Cattolica, le preguntaron dos veces sobre su renuncia.

Primero lo que respondió a los jesuitas de Congo.

Se ha hablado de su posible dimisión. ¿Realmente pretende dejar el ministerio petrino? Y el General de la Compañía, según en su opinión, ¿debería permanecer en el cargo de por vida?

Mira, es verdad que escribí mi dimisión dos meses después de las elecciones y entregué esta carta al cardenal Bertone. No sé dónde está la carta. Lo hice por si tengo algún problema de salud que me impida ejercer mi ministerio y no soy plenamente consciente para dimitir. Sin embargo, esto no significa para nada que la renuncia de los Papas deba convertirse en algo así como una «moda», algo normal. Benedicto tuvo el valor de hacerlo porque no quería seguir adelante a causa de su salud. Esto no está en mi agenda por el momento. Creo que el ministerio del Papa es ad vitam. No veo ninguna razón para que no sea así. Piensen que el ministerio de los grandes patriarcas es siempre vitalicio. Y la tradición histórica es importante. Si, por el contrario, le hiciéramos caso a los «chismes», ¡entonces deberíamos cambiar de Papa cada seis meses!

Sobre la Compañía de Jesús: sí, en esto soy «conservador». Debe ser para toda la vida. Pero, obviamente, surge la misma pregunta que concierne al Papa. El Padre Kolvenbach y el Padre Nicolás, los últimos dos Generales anteriores, lo dejaron por motivos de salud. Me parece importante recordar, además, que una de las razones por las que el generalato en la Compañía es de por vida es para evitar cálculos electorales, las facciones, los chismes…

Los jesuitas en Sudán del Sur le preguntaron sobre lo mismo.

¿Está pensando en renunciar?

No, no se me ha pasado por la cabeza. Pero escribí una carta y se la entregué al cardenal Bertone. Contiene mi dimisión en caso de que no me encuentre en el estado de salud y conciencia para poder renunciar. Pío XII también escribió una carta de renuncia, como prevención en el caso de que Hitler se lo llevara a Alemania. En ese caso dijo que capturarían a Eugenio Pacelli y no al Papa.