Dos veces en menos de un año, no poco para quien juega el papel de complacer a todo el mundo diciéndole lo que quiere oir. Por segunda vez este año Francisco ha infuriado a los animalistas (para la primera ver aquí) por una frase suya en el discurso pronunciado durante la audiencia a los miembros de la Asociación de Otorrinolaringólogos Hospitalarios Italianos (AOOI) y de la Federación Italiana de Médicos Pediatras (FIMP), Aula Paulo VI en el Vaticano, Nov-18-2023. Nuestra traducción.
Tal vez esto no deberia decirlo, pero lo digo: hoy se prefiere tener un perro que un hijo.
Pasadas unas 24 horas, los animalistas de la Organización Internacional para la Protección de los Animales, Oipa, han salido a censurar las expresiones de Francisco mediante un comunicado, Nov-19-2023.
Comunicado de prensa
19 de noviembre 2023
PAPA FRANCISCO: «SE PREFIERE TENER UN PERRO QUE UN HIJO». OIPA: «OTRA MANIFESTACIÓN QUE REVELA POCA EMPATÍA POR LAS CREATURAS NO HUMANAS»
Oipa recuerda lo preciosa que es la presencia de animales en nuestra existencia, animales que también colaboran en la sociedad, como el perro molecular de Protección Civil que ayer encontró el cuerpo sin vida de Giulia Cecchettin
Siga @secretummeumEl Papa Francisco volvió ayer sobre el tema de los animales domésticos que, en su opinión, sustituirían a los hijos. «Hoy en día la gente prefiere tener un perro que un niño. Vuestra tarea es muy limitada, pero la de los veterinarios va en aumento, ¿eh? Y esto no es una buena señal, no es una buena señal», dijó el pontífice, dirigiéndose a una representación de pediatras en el Aula Paulo VI.
«Una de las varias manifestaciones de este Papa que parece considerar el amor como limitado cuantitativamente, como si, dándolo a un animal, se lo quitara a los demás», comenta la Organización Internacional para la Protección de los Animales (Oipa). «Contraponer a los hijos con perros y gatos revela la poca empatía hacia los animales de un pontífice que también tomó el nombre de Francisco, como el Santo de Asís que llamaba “hermanos” y “hermanas” a todas las criaturas».
En la encíclica Laudato si' de Francisco leemos: “(...) cuando el corazón está verdaderamente abierto a la comunión universal, nada ni nadie queda excluido de tal fraternidad”. Sin embargo, este Papa declaró que se negó a bendecir a un perro. Él mismo lo relató en los Estados Generales de la natalidad el pasado mes de mayo, describiendo cuando una mujer se le acercó pidiéndole que bendijera a su perrito: «No tuve paciencia y reprendí a la señora diciéndole: “Muchos niños tienen hambre y ella con el perro...”» Sin embargo, invita a personas en dificultades al circo con animales, cuyos operarios son recibidos en el Vaticano, y parece ignorar cómo detrás de los ejercicios del espectáculo circense se esconden privaciones, malos tratos y sufrimiento para animales como leones, tigres, elefantes, jirafas, obligados a vivir en cautiverio, tras las rejas, con espacio limitado disponible y perpetuamente bajo estrés, obligados a vivir una vida contra natura.
Es evidente que para Francisco la vida animal es menos importante que la vida humana. Pero quien siente que la vida es sagrada ama la vida más allá de las especies, comenta Oipa, que finalmente recuerda cuán preciosa es la presencia de animales en nuestra existencia, animales que también colaboran en la sociedad, como el perro molecular de Protección Civil que ayer encontró el Cuerpo sin vida de Giulia Cecchettin.