Esta es una información de agencia Lusa, Oct-04-2022. Traducción de Secretum Meum Mihi.
Díli, 04 oct 2022 (Lusa) - El representante del Vaticano en Dili hizo este martes un llamamiento a los católicos timorenses orientales para que acepten los “castigos” impuestos por la Santa Sede al obispo Ximenes Belo por lo que calificó de “crímenes graves”, pidiendo que se respete esta decisión.
"Esta es una sentencia. Es una declaración que no está al nivel de acusación. Las restricciones que se le impusieron fueron declaradas por la autoridad. Es una decisión, no una acusación. No estamos a nivel de acusación, estamos a nivel de decisión, que el obispo aceptó”, dijo monseñor Marco Sprizzi en declaraciones a RTTL, la televisión pública timorense.
“No vamos a tener más ningún proceso. Ni del Estado, porque los crímenes ya prescribieron, fueron ya hace más de 20 años, y porque por parte de la Santa Sede ya está todo juzgado y decidido. Son decisiones tomadas y aceptadas por el obispo y que solo tenemos que respetar, respetar al obispo y respetar las decisiones del Vaticano”, sostuvo.
Las declaraciones de Prizzi, transmitidas íntegramente en el principal noticiero vespertino de RTTL —en un segmento de unos ocho minutos— surgen en un momento en que el debate en Timor Oriental se intensificó tras la divulgación de los abusos por parte de un diario holandés.
La noticia llevó a la Oficina de Prensa de la Santa Sede a anunciar que había impuesto sanciones disciplinarias a Ximenes Belo en los dos últimos años, tras recibir denuncias de que el premio Nobel de la Paz había abusado sexualmente de menores en su país en la década de 1990.
Sprizzi dijo que la oficina que maneja los casos de abuso sexual recibió denuncias “sobre el comportamiento del obispo” en 2019 y, en el plazo de un año, había impuso sanciones.
Estas sanciones incluyen límites a los movimientos del obispo y al ejercicio de su ministerio, así como la prohibición de mantener contacto voluntario con menores o con Timor Oriental, habiéndose incrementado las penas en 2020.
“Esta es la posición oficial, cierta, de la Santa Sede sobre este asunto. No fue por causa del artículo del periódico holandés. Fue en 2019. Y en septiembre de 2020, después de un año de investigaciones, se decidieron estas sanciones, estas restricciones”, enfatizó Sprizzi.
“Son restricciones un poco duras, porque el caso era delicado, serie y los delitos son graves”, afirmó, explicando que en ambos casos, en 2020 y cuando se “reforzaron” en 2021, “las medidas fueron formalmente, explícitamente , oficialmente, aceptadas por el obispo Dom Belo”.
“Les digo a los católicos timorenses, que son tan fieles al Papa, al Vaticano, que sigan las directrices del Vaticano, así como el amo Belo siguió las directrices del Vaticano. Él aceptó”, afirmo.
No puede ser que el amo Belo acepte y sus amigos, fieles, no. Tenemos todos que aceptar porque todos somos miembros de la iglesia, fieles al Santo Padre”, subrayó.
Marco Sprizzi también defendió la cobertura periodística del caso, diciendo que ha publicado lo que ya ha anunciado el Vaticano, pidiendo que deje de ser atacada.
“No es bueno protestar contra quienes simplemente dan la noticia de lo que ha publicado el Vaticano. Tenemos que aceptarlo con espíritu de confianza y paz”, dijo en referencia a las críticas, amenazas e insultos dirigidos a los periodistas.
En su declaración en portugués, realizada principalmente hablando en cámara, Marco Sprizzi explicó en varios momentos alguna de ls terminología utilizada, incluyendo las funciones de la Congregación para la Doctrina de la Fe, “competente para juzgar estos crímenes” y equivalente al “Tribunal Supremo” del Vaticano.
Y también dejó un mensaje sobre los pasos dados por la Iglesia en Timor Oriental en esta materia, recordando y homenajeando el pasado histórico de Ximenes Belo en la defensa de la independencia de Timor Oriental.
“Hablamos de las cosas buenas de Timor Oriental: el primer Estado del mundo en adoptar la declaración del Santo Padre sobre la Fraternidad Humana. Tenemos que mostrar esta fraternidad. Los obispos timorenses y la Conferencia Episcopal aprobaron los lineamientos para la protección de los menores y esto es algo muy bueno, muy avanzado, para que nuestros niños, nuestros jóvenes timorenses encuentren un lugar seguro en los ambientes y lugares de la iglesia”, afirmó.
“Respetamos a Don Belo. Tenemos mucho respeto por él, por su historia, por su contribución a la lucha por la liberación, por su cercanía al pueblo, especialmente a los que estuvieron en primera línea para defender la libertad, la liberación de Timor Oriental. Todo esto, nadie lo puede negar, nadie lo puede cancelar. Esto debe quedar claro: el Vaticano no está en contra del obispo Belo, recuerda bien los grandes méritos históricos de Dom Belo”, consideró.
Al mismo tiempo, reiteró: “el Vaticano siempre está del lado de la verdad, porque Jesucristo es siempre nuestra verdad. Lo que fue, fue y lo aceptamos con paz”, afirmó.
Gran parte de la prensa timorense aún no había informado en detalle la posición del Vaticano, y con las redes sociales que fueron utilizadas para una intensa etapa de debate con críticas a la prensa extranjera, teorías conspirativas sobre el ‘timing’ y el origen de la noticia inicial y hasta tentativas para identificar a las víctimas.
El caso llegó incluso al Parlamento Nacional donde diputados de diversas bancadas, entre ellas la El principal partido de gobierno, el Frente Revolucionario de Timor Oriental Independiente (Fretilin), que afirmaron que estaba en marcha un “juzgamiento de los medios y algunas personas”, que “no resultó en una buena imagen” para Ximenes Belo.
“Pido a los medios de comunicación nacionales e internacionales que publiquen noticias fundamentadas y que también se enfoquen en noticias que se refieran al desarrollo del país. Nuestra bancada ofrece solidaridad al Obispo emérito de Dili”, declaró Antoniho Bianco, vicepresidente de la bancada, citado por [la agencia noticiosa] Tatoli.
Olinda Guterres, líder de la bancada Kmanek Haburas Unidad Nacional Timor Oan (KHUNTO), otro de los partidos del Gobierno, se dirigió a los medios: “Pido a los medios nacionales e internacionales que no publiquen noticias sin evidencias incontestables”.
En un texto publicado en la página de la bancada —y publicado varios días después de conocerse la sentencia vaticana— el partido también se refiere a la presunción de inocencia.
“Hoy Dom Carlos es acusado, es denunciado. Las sentencias callejeras toman su turno, olvidando la dignidad humana y la presunción de inocencia. Dom Carlos es acusado antes de una acusación, es sentenciado antes de la propia sentencia. Don Carlos es condenado antes de la condena”, refiere el texto.