“«L'Osservatore di strada» no será solo un periódico de los pobres y para los pobres”. ¿El periódico arcoíris del Vaticano?

Los medios de comunicación están caracterizando como “el periódico de los pobres y para los pobres” al nuevo mensual L'Osservatore di Strada que lanzará la semana entrante L'Osservatore Romano. La Oficina de Prensa de la Santa Sede avisa hoy de la conferencia de prensa el próximo Mártes para su presentación, y esperamos que alguno de los periodistas indague si el nuevo periódico no es más que un caballo de troya para que el lobby homosexual tenga su espacio de cabildeo desde dentro de los muros del Vaticano. ¿Por qué lo decimos?, pues basados en el artículo que aparece hoy en la edición en italiano de L'Osservatore Romano para presentar la nueva publicación, en dónde se explica que “«L'Osservatore di strada» no será solo un periódico de los pobres y para los pobres”, para pasar a explicar a quiénes se le dará cabida en sus páginas. Presten atención en qué consistirá el nuevo medio que presentan bajo el lema de “Periódico de amistad social y de la fraternidad”.
El 29 de junio, solemnidad de los santos Pedro y Pablo, después del rezo del Ángelus con el Santo Padre, se distribuirá entre los fieles en la Plaza de San Pedro un nuevo mensual de «L'Osservatore Romano»: «L'Osservatore di strada», un periódico pensado y realizado por la comunidad de trabajo del Dicasterio para la Comunicación que con este proyecto pretende dar voz a los que normalmente no son escuchados, a los pobres, a las personas heridas por la vida, a quien es dejado en la puerta y excluido. Un periódico —que el director Andrea Monda entregó al Papa Francisco durante la audiencia celebrada esta mañana— a través del cual reconocer y restituir el derecho a la palabra a quienes la sociedad contemporánea trata como “descarte”, evidenciando en patrimonio de experiencias, de saberes y de valores de los cuales son custodios.
«L'Osservatore di strada» se publicará el primer domingo de cada mes, tanto en versión impresa como en línea (https://www.Osservatoreromano.va/it/Osservatore-di-strada.html). La circulación de los ejemplares en papel del mensual tendrá lugar todos los domingos en la Plaza de San Pedro, con motivo del Ángelus del Papa. Se harán cargo lgunos invitados del Palazzo Miglior, la estructura confiada por el Dicasterio para la Caridad a la Comunidad de Sant'Egidio para dar un techo a los que no lo tienen, con la ayuda de voluntarios.
Incluso si los pobres pueden quedarse con las ofertas que recibirán del trabajo de circulación (el periódico se distribuirá de hecho de forma gratuita), «L'Osservatore di strada» no será solo un periódico de los pobres y para los pobres. Está la voluntad de ser ante todo un periódico con los pobres, un periódico realizado junto con ellos, dando modo de expresarse a quienes tienen talento para escribir o diseñar o simplemente una historia que contar o una opinión que expresar. Y si a alguien le faltan los “instrumentos”, el periódico se las proporcionará, involucrando a intelectuales y personalidades del mundo de la cultura (escritores, poetas, periodistas, fotógrafos, dibujantes, directores, actores, músicos...) que pondrán a disposición su arte para realizar juntos un aporte que sea fruto, no de una fría mediación en la mesa, sino de una relación directa, cara a cara. Todos en el mismo plano. A todos la misma dignidad. Para todos el mismo respeto.
El periódico constará de doce páginas. En portada, un “editorial de calle» introducirá el tema del mes que luego se desarrollará en el artículo “cuatro manos y dos corazones” que ocupará las páginas 2 y 3. Para el primer número, dedicado al tema de la “calle”, el artículo lleva las firmas de Mimmo, una persona sin hogar en el centro histórico de Roma, y del escritor Daniele Mencarelli.
Cada mes se dará un espacio particular (página 4) a las voces de los migrantes, quienes podrán contar su historia y sus esperanzas.
«L'Osservatore di strada» también quiere participar en la misión de las otras ediciones del periódico del Vaticano y de los otros medios de comunicación que dependen del Dicasterio para la Comunicación. Por eso, en las páginas centrales, la reflexión sobre el tema del número será protagonizada por el Papa Francisco, a través de una gran antología de sus palabras y gestos. Siguiendo una página dedicada al voluntariado, con historias que cuentan la relación entre el buen samaritano y el moribundo en el camino de Jericó.
A continuación, se dedicarán dos páginas enteras a los “cantos de las periferias”, una colección de relatos, reflexiones, poesías, dibujos realizados por personas asistidas por asociaciones y grupos eclesiales o simplemente encontradas en la calle. Para cerrar estas páginas, un artículo presentará la experiencia de otros periódicos callejeros publicados en Italia y en todo el mundo.
Finalmente, “La otra portada”, con dos lecturas, una en clave espiritual y otra humorística, del tema del número. Para la primera edición, los autores son el cardenal Enrico Feroci y el artista callejero romano Maupal (Mauro Pallotta).
«Periódico de amistad social y de la fraternidad» —como se lee bajo el título— « L’Osservatore di strada» quiere ser también un instrumento al servicio de la comunión y la colaboración entre quienes se ponen al servicio de la caridad. En este compromiso, el periódico ha obtenido el apoyo de varias organizaciones que actúan en el mundo de la caridad —como Caritas, la San Vincenzo, la Comunidad de Sant'Egidio, Centro Astalli, el Circolo San Pietro, la Associazione Santi Pietro e Paolo— y de varias personas, entre ellas el cardenal Konrad Krajewski, el cardenal Enrico Feroci y el obispo auxiliar de Roma para la caridad, monseñor Benoni Ambarus.
Para continuar su aventura, «L'Osservatore di strada» se confía totalmente a la generosidad de los benefactores, que con sus donaciones podrán cubrir los gastos de impresión, y de amigos y profesionales que dedicarán gratuitamente su tiempo y su talento al cuidado de la redacción del periódico.