Monday, February 28, 2022

La expresión “invasión rusa” aparece en editorial de Vatican News


No es la posición oficial del Vaticano, pero es la primera vez que vemos la expresión “invasión rusa” en uno de los medios de comunicación del Vaticano. Se trata de uno de los editoriales de Vatican News, publicado hoy, firmado por Sergio Centofanti, subdirector de la Dirección Editorial del Dicasterio para la Comunicación, que lleva por titulo “No abandonemos a los ucranianos” y en el cual, como novedad, se encuentra la alusión a la “invasión rusa”.

No abandonemos a los ucranianos

Tras la invasión rusa, muchos ucranianos se sintieron abandonados. Pero además de la guerra, la solidaridad con el pueblo ucraniano estalló en Europa y en todo el mundo. El Papa promovió una jornada para estar cerca del sufrimiento de los ucranianos: "Dios está del lado de los que trabajan por la paz, no de los que usan la violencia".

Sergio Centofanti - Ciudad del Vaticano


Muchos ucranianos se han sentido abandonados en estos dramáticos días. No quieren oír hablar del "precio del gas", porque se sienten vendidos. Saben que una intervención externa podría desencadenar un conflicto mucho mayor, devastador para el mundo. El presidente bielorruso Lukashenko ha dicho que incluso las sanciones podrían empujar a Putin hacia una guerra nuclear. Un escenario que no querríamos ni siquiera pensar.

Pero ante el ataque ruso y las amenazas de pesadilla, la solidaridad crece. La invasión de un país libre ha unido a Europa como nunca antes. Europa, tan dividida en tantas cuestiones, nunca ha estado tan unida como hoy: está al lado del pueblo ucraniano. Los países vecinos han abierto sus fronteras a los refugiados: Polonia, Hungría, Rumanía, Eslovaquia, han abierto sus brazos. Otros países están dispuestos a acoger a los exiliados. En Europa y en otros continentes se están produciendo manifestaciones e iniciativas por la paz y la solidaridad con Ucrania.

Las comunidades cristianas, las parroquias, las asociaciones y Cáritas se han movilizado para enviar ayuda humanitaria de todas las formas posibles. El Presidente Zelenskyi dijo que el pueblo ucraniano siente el apoyo del Papa. En el Ángelus, Francisco reiteró el llamamiento a silenciar las armas, dijo que "Dios está del lado de los que trabajan por la paz, no de los que usan la violencia" y que "la gente común quiere la paz". Hay mucha solidaridad ante las imágenes de niños, mujeres y ancianos, que huyen a pie o están encerrados en refugios para rezar con rostros consternados o están junto a los caídos. Ahora hay esperanza en las negociaciones.

Hay tanta cercanía hacia los ucranianos. Un pueblo que quiere la paz y que ha sufrido mucho. En los años 30, Stalin los hizo pasar hambre porque se resistían a las políticas soviéticas: varios millones de ucranianos murieron por la carestía. Se trata de un exterminio poco conocido, el Holomodor, la aniquilación de un pueblo por inanición.

Muchos rusos se avergüenzan de la invasión. Los medios de comunicación progubernamentales la llaman "operación militar" o intervención de "liberación" o "desnazificación". Hay muchos rusos que lo creen. Pero muchos rusos se manifiestan a favor de la paz, en contra del ataque. Muchos han sido detenidos. Apoyemos a los rusos que están a favor de la paz. Apoyemos a los soldados rusos que no quieren disparar contra los ucranianos, tal vez con sus propias manos frente a un tanque. Ayudemos a los rusos que creen en esta guerra a entender dónde está el mal. Pero, sobre todo, no abandonemos a los ucranianos.

Cardenal Lojudice positivo para Covid-19


Lo informa la arquidiócesis de Siena, Feb-28-2022, de la cual el cardenal Augusto Paolo Lojudice es su arzobispo. Nuestra traducción.

El arzobispo de Siena-Colle di Val D’Elsa-Montalcino, el Card. Augusto Paolo Lojudice ha resultado positivo al Covid. El purpurado está en buenas condiciones. Todos los compromisos pastorales del cardenal, de esta semana, han sido cancelados.

El arzobispo, después de la aparición de síntomas leves de gripe se ha sometido, en la mañana del sábado, al hisopado resultando positivo al Covid-19.

El Card. Lojudice de inmediato se ha aislado en su apartamento en el arzobispado y actualmente es asintomatico, siendo monitoreado constantemente.

¿Regresa o no el cardenal Woelki?, ¿y si es para anunciar su renuncia?


A estas alturas, según un reporte de agencia DPA, no se sabe exactamente cómo será el regreso al ejercicio del cardenal Rainer Maria Woelki, arzobispo de Colonia, Alemania, anunciado para el Miércoles de ceniza, tras una pausa de cinco meses.

La semana pasada la arquidiócesis anunció que su participación en la Misa en la Catedral el Miércoles, como un servicio ecuménico en Düsseldorf el siguiente Sabado, se habían cancelado. En su lugar se anunció que el cardenal publicaría una carta pastoral para la Cuaresma y un comunicado de prensa.

Señales contradictorias provienen de círculos diocesanos. Por un lado, se dice que el cardenal Woelki nunca renunciará por su propia voluntad. Probablemente se mantiene alejado de los servicios de la iglesia porque rehúye la exageración de los medios. Probablemente espera que la atención mediática disminuya después de un tiempo.

Pero existen otros rumores que señalan que el Miércoles el cardenal Woelki desearía anunciar su retiro y que el obispo de Münster, Mons. Felix Genn, con quien se reportó fue visto en el Vaticano la semana pasada, asumiría temporalmente como Administrador Apostólico.

Los mismos círculos diocesanos indican que el cardenal Woelki no ha contactado a ninguna persona de las que actualmente se encargan o administran la arquidiócesis. Recientemente el actual administrador, el obispo auxiliar Rolf Steinhäuser, manifestó que se le había prohibido desde el Vaticano tener contacto con el cardenal Woelki. La orden concreta vino del cardenal Marc Ouellet, Prefecto de la Congregación para los Obispos. Steinhäuser indicó que durante la ausencia solamente se había comunicado por escrito con Woelki al principio de ella y en Navidad.

De todos modos, y según nuestro modo de ver, es comprensible que Woelki no quiera hablar con ninguno de sus inmediatos colaboradores, visto que es allí donde se encuentran las principales resistencias.

La ausencia de cinco meses del cardinal Woelki fue ordenada por Francisco a pesar de que se había determinado que no encubrió en a ningún clérigo abusador pero se le acusó de “grandes errores”. No se sabe si la intención del retiro se le ordenó en espera de que con el tiempo la atención se desvaneciera o se debilitara, pero ello parece no haber ocurrido.