Si alguien lo ha notado, en este blog solemos dar los créditos, y en el caso presente no sabemos exactamente a quién dárselos. Desde el día de ayer se empezó a difundir muy ampliamente la carta mediante la cual el cardenal vicario de Roma (al obispo de Roma le es imposible ejercer como tal en los asuntos del día a día, por eso delega en un vicario), Angelo de Donatis, implementa para esa jurisdicción el reciente motu proprio Traditionis Custodes, ejercitando “una viva caridad pastoral”. Nosotros vimos la carta primero publicada por Diane Montagna vía Twitter, y a ella le damos el crédito.
La “viva caridad pastoral” ya verán en qué consiste, explicitada especialmente en el tercer parágrafo de la carta. Para ser sinceros nos ha dado un tanto de aburrimiento traducir la carta integralmente, no sabemos si alguien lo haya hecho, pero por ahora nosotros no.
Este es un artículo en español de Aciprensa, Nov-10-2021, mediante el cual se pueden hacer una idea de cómo se implementa el motu proprio, y si esa es la diócesis de Francisco se infiere que es así como Francisco lo desea.
Diócesis de Roma prohíbe celebrar Misa en latín en Semana Santa 2022
POR MIGUEL PÉREZ PICHEL | ACI Prensa
El Vicario General para la Diócesis de Roma, Cardenal Angelo De Donatis, ha prohibido la celebración de la Misa tradicional durante el Triduo Pascual, en aplicación del motu proprio del Papa Francisco Traditionis custodes.
La Misa tradicional en latín es también conocida como Misa tridentina por tener su origen en el Concilio de Trento de 1563.
En una carta fechada el 7 de octubre pero difundida el pasado 9 de noviembre, el Cardenal Angelo De Donatis escribió que en la Diócesis de Roma se podrá seguir celebrando de acuerdo con el Misal Romano de 1962 (la última edición del Misal de la Misa tradicional), en cinco iglesias de Roma, excepto el Jueves Santo, el Viernes Santo y el Sábado de Pascua.
El Cardenal De Donatis señaló también en la carta que ni los sacramentos ni los sacramentales podrán celebrarse de acuerdo con el Misal anterior al Concilio Vaticano II, únicamente la Misa.
Aunque el Obispo de Roma es el Papa Francisco, el Santo Padre delega el trabajo de la Diócesis al Vicario General, que ejerce el poder ejecutivo de esta jurisdicción eclesiástica.
El motu proprio Traditionis custodes, promulgado por el Santo Padre el pasado 16 de julio, estableció una serie de restricciones para la celebración de la Misa tradicional.
Entre otras medidas, en el motu proprio se establece que “corresponde al Obispo, como moderador, promotor y guardián de la vida litúrgica en la Iglesia, de la que es principio de unidad, regular las celebraciones litúrgicas”.
“Por tanto, les corresponde a ustedes (los obispos), como ordinarios locales, autorizar en sus Iglesias el uso del Misal Romano de 1962, aplicando las normas del presente Motu Proprio”, señalaba el Papa Francisco.
Como respuesta al Motu Proprio, el Cardenal Vicario de Roma señaló que, con su carta, “pretende seguir el trabajo de facilitar la comunión eclesial a los católicos que se sienten vinculados a algunas formas precedentes de la liturgia”.
Para lograr ese objetivo, “parece oportuno continuar a ejercer un camino de caridad pastoral hacia los fieles” que desean participar en la Misa tradicional en latín.
En la carta pastoral, el Cardenal De Donatis afirma que “todos los presbíteros, diocesanos o religiosos, que deseen continuar haciendo uso de la facultad de celebrar según el Misal Romano de 1962 en el territorio de la Diócesis de Roma, deben ser previamente autorizados por el obispo diocesano”.
Por lo tanto, “todas las peticiones relativas a la actuación del motu proprio deben enviarse por escrito a mí, el Cardenal Vicario, que tomaré la decisión por medio de un encargado designado por mí”.
El Cardenal designó al párroco de la iglesia de la Santísima Trinidad de los Peregrinos, administrada por la Fraternidad Sacerdotal San Pedro, como responsable pro tempore para la “celebración digna de la liturgia Eucarística, así como el cuidado pastoral y espiritual ordinario de los fieles”.