Sobre la información del día Domingo, originada en Suiza, de que tres guardias suizos ante las nuevas medidas coercitivas introducidas en el Estado segregacionista Vaticano mediante las cuales se les forzaba recibir el puyazo y decidieron abandonar, Vatican News en italiano salió el Lunes, Oct-04-2021, a ejercitar la operación de lavado de imagen mediante el siguiente artículo (nuestra traducción).
Con la entrada en vigor de la reciente Ordenanza del Estado de la Ciudad del Vaticano que ha hecho obligatoria la presentación de la certificación adecuada para el ingreso en el Estado y áreas extraterritoriales, el Cuerpo Pontificio de la Guardia Suiza consideró oportuno introducir algunas medidas sanitarias en línea con las adoptadas por otros cuerpo de ejército en el mundo.
En particular —explicó el portavoz de la Guardia Suiza a los periodistas— se pidió a todos los guardias que efectuaran la vacuna contra Covid19, para proteger su salud y la de otras personas con las que entran en contacto por motivos de servicio.
Algunos miembros de la Guardia, tres, han elegido no adherir a tal solicitud y han abandonado el Cuerpo por su propia voluntad. Para otros tres, se ordenó la suspensión temporal del servicio a la espera de que puedan regularizar su propia posición de acuerdo a las disposiciones del Cuerpo.
Por medio de Edward Pentin nos enteramos además de una circunstancia nueva con referencia a este asunto, al mejor estilo de las sectas el Vaticano ha impartido jornadas de “adoctrinamiento” vaↄunal para la Guardia Suiza. Escribe Pentin en National Catholic Register, Oct-04-2021 (nuestra traducción):
National Catholic Register ha sabido que hasta 30 guardias suizos se habían resistido a las vacunas obligatorias en Julio, pero la mayoría finalmente consintió, incluido el comandante de los Guardias, Coronel Christoph Graf. Él reaciamente recibió la vacuna hace solo unos pocos días después de ser “amenazado”, según varias fuentes dentro del cuerpo. National Catholic Register ha pedido al Vaticano si puede confirmar la acusación.
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Una fuente informada del Vaticano le dijo a National Catholic Register que desde la primavera, el Vaticano ha estado tratando de “adoctrinar y convencer” a los jóvenes guardias de que se vacunen, llevando a cabo en las barracas “seminarios” especiales dirigidos por la Dra. Tiziana Sansolini, una médica de la Dirección de Sanidad e Higiene del Vaticano.
Pero tal presión y compulsión parece ir en contra de una nota doctrinal emitida el pasado mes de Diciembre por la Congregación para la Doctrina de la Fe que decía que “la vacunación no es, por regla general, una obligación moral y que, por lo tanto, la vacunación debe ser voluntaria”.
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El Dr. Vito Del Deo, un médico que se desempeñó como médico en el Cuerpo de Élite del Regimiento de Artillería Alpina de Italia, se sintió decepcionado por el mandato impuesto a la fuerza armada papal.
“La Guardia Suiza ha jurado servir y proteger el Vaticano y la vida del Papa de cualquier amenaza durante más de mil años”, dijo a National Catholic Register. “Ya es hora de que el Papa y todos los miembros y ciudadanos del Vaticano retribuyan su cuidado, respeto y lealtad en el mismo grado”.