Friday, February 19, 2021

Así vivió el ‘católico practicante’ Joseph Biden el Miércoles de Ceniza


El presidente de EEUU, el ‘católico practicante’ Joseph Biden, decidió hacer una declaración el pasado Miércoles de Ceniza, precisamente llamada así, “Declaración del Presidente Joe Biden el Miércoles de Ceniza”, de la cual ofrecemos nuestra traducción.

Hoy, me uno a los cristianos de nuestro país y de todo el mundo para celebrar el Miércoles de Ceniza. Al entrar en el tiempo de Cuaresma, sabemos que este momento de arrepentimiento, reflexión y renovación llega en medio de un invierno doloroso para nuestra nación y el mundo.

En este Miércoles de Ceniza y todos los días, mantenemos a cada familia con un lugar vacío en su mesa en nuestros corazones. Oramos por todos aquellos que han atravesado tiempos difíciles y están preocupados por lo que traerá la mañana. Encontremos la fuerza el uno en el otro y la fe que nos proporcione un propósito. Y miremos con esperanza y anticipación hacia la Pascua y los días más brillantes por delante.

Posteriormente, se dirigió al campus la Universidad jesuita de Georgetown en Washington, D.C., donde recibió la imposición de la ceniza por parte del P. Brian McDermott. La foto que acompaña esta entrada corresponde exactamente al momento de su llegada.

Hans Zollner, experto en abusos de la Iglesia: “Todavía hoy existen lugares en los que no hacemos lo necesario”


El cardenal Sean O'Malley, por mucho que continúe como presidente de la Pontificia Comisión para la Protección de los Menores, y aunque lo niegue, ya no goza del favor de Francisco, principalmente porque antes de la cumbre vaticana de 2019 sobre el abuso de clérigos a menores, su propuesta de crear comisiones independientes de laicos para que juzgaran a los obispos desagradaba a Francisco y consecuentemente fue descartada para privilegiar la propuesta de Cupich y Wuerl, de que fueran los metropolitanos los que cubran el trasero juzguen a los sufragáneos, que es lo que hoy tenemos (el caso más reciente que sirve como ejemplo es el del obispo de Dodge, Kansas, EEUU, bajo investigación canónica preliminar que realizará el arzobispo metropolitano de Kansas City, Kansas, Mons. Joseph Naumann), lo cual ocasionó que para la aludida cumbre no fuera incluido por Francisco como organizador, sino que le pasara la responsabilidad al P. Hans Zollner, miembro también de la Pontificia Comisión para la Protección de los Menores; el card. O'Malley sí participó de la cumbre, pero no por ser miembro de esa comisión sino por ser miembro del consejo de cardenales que ayuda a Francisco a la reforma de la Curia. El que desde hace dos años toma la voz cantante y habla en representación del Vaticano en todo lo relacionado con los abusos de los menores por partes de miembros de la Iglesia, es el P. Hans Zollner. Tal ocurre con una entrevista que concedió a agencia Europa Press, sobre la cual se publicó el siguiente artículo, Feb-18-2021.

ROMA, 18 Feb. (EUROPA PRESS) - El sacerdote jesuita alemán Hans Zollner, miembro de la Pontificia Comisión para la Protección de Menores y director del 'Centre for Child Protection' de la Universidad Gregoriana (Roma), considera que "todavía hay un largo camino por recorrer" en la Iglesia para implementar un sistema perfecto de prevención de abusos sexuales.

"Todavía hoy existen lugares en los que la Iglesia continua negando la evidencia de los abusos, protegiendo a los violadores, en los que no hacemos lo necesario para depurar responsabilidades cuando se descubre que un obispo provincial ha encubierto abusos o los ha negado", explica.

Así lo ha puesto de manifiesto Zollner en una entrevista con Europa Press cuando se cumplen dos años este viernes 19 de febrero de la cumbre antipederastia celebrada en el Vaticano, que reunió a la mayoría de los episcopados del mundo.

En este sentido, reconoce que "lamentablemente esta tarea es vista todavía por muchas diócesis como algo dirigido a expertos o a los que se deben ocupar de los trapos sucios". "Por desgracia, en muchos países todavía no se toman en serio la prevención y la justicia a las víctimas. Dos elementos que deben ser parte integrante de la cultura de la Iglesia", asegura Zollner.

Las leyes canónicas se han actualizado con la promulgación del Motu proprio 'Vos estis lux mundi' ('Vosotros sois la luz del mundo'), que obliga a los clérigos y religiosos a denunciar los abusos y establece la apertura por parte de todas las diócesis de un sistema de escucha a las víctimas, así como la abolición del secreto pontificio.

"La prevención debe ser la seña de identidad de una comunidad de cristianos sana", reseña Zollner, que lamenta que algunas diócesis y órdenes de religiosas no hayan tomado "suficientemente en serio la tarea de la prevención y la del resarcimiento y hacer justicia a las víctimas". "Esto es un obstáculo que no nos deja despegar y poder ser un modelo. Hemos perdido la confianza de las personas. Por eso, no podemos volver a fallar y es normal que seamos objeto de un mayor escrutinio", manifiesta.

Por ello, hace un llamamiento a todos los responsables eclesiales a no "titubear" porque para enfrentar la lacra de los abusos en la Iglesia hay que poner en marcha una acción "sólida y consistente". "No se puede jugar con esto. La defensa de los más vulnerables debe ser el timón que nos guía", enfatiza. Asegura que la tarea implica a toda la comunidad eclesial, "también a los laicos", cuya contribución es "fundamental" para conseguir "una Iglesia más segura".

"Los laicos en muchos casos gestionan los colegios católicos, llevan la catequesis para preparar los sacramentos de la comunión y la confirmación, están en contacto con menores. Por eso, tienen que hacerse fuertes y llamar la atención de los obispos cuando no lo hacen bien, cuando ven que no aplican las normas de la Iglesia. Tienen que dar la señal de alerta cuando los obispos encubren un caso de abusos", argumenta.

RESISTENCIA PASIVA

Zollner tiene una perspectiva global que le lleva a reconocer que en algunos sectores de la Iglesia existe una "cierta resistencia pasiva" que se manifiesta en "titubeos e inercia". Entre las que han sido ejemplares están las diócesis de Estados Unidos, Irlanda, Bélgica o Australia, que se han visto empujadas a "hacer cuentas con el pasado" tras el estallido de sus respectivos escándalos y llevan años "verificando la implementación de las líneas guía, han instituido oficinas específicas, han formado a personal cualificado".

Pero su ejemplo está lejos de ser una realidad consolidada a nivel global. En este sentido Zollner, hace una división en tres partes del mapa del mundo eclesial: "En el segundo lugar están las diócesis que sí tienen un protocolo de actuación, pero no han incluido las últimas directivas del Papa. Y el último grupo está compuesto por las que arrastran un gran retraso que no cuentan ni siquiera con un manual de actuación ante abusos". En todo caso, incide en que en este último grupo hay como mucho "siete u ocho conferencias episcopales". "Son aquellas que están radicadas en países en guerra o que atraviesan graves crisis humanitarias. La mayoría están entre el grupo dos y el uno", señala.

Por otro lado, ha asegurado que si bien la Iglesia "no puede presentarse como un modelo en muchos países" es la institución "que más ha invertido en todo el mundo en la prevención de abusos". No obstante, ha alertado que "en el ámbito del resarcimiento a las víctimas, la Iglesia está a la cola". "Tenemos que mejorar el sistema de hacer justicia a las víctimas", subraya.

Preguntado sobre la reivindicación histórica de las asociaciones de víctimas de transmitir de forma automática a las autoridades civiles las denuncias sobre abusos por parte de un sacerdote, religiosos o laico a menores o adultos vulnerables, se ha mostrado en desacuerdo. "No puede ser una obligación. Hay que poner el foco en la seguridad de la víctima. Y en muchos países, presentar una denuncia en la policía no comporta una seguridad mayor. Hay casos en los que es incluso peor --señala--. La Iglesia es universal. Está presente en países en guerra, con sistemas corruptos, países en los que el sistema judicial no funciona".

“La Santa Sede prevé un déficit de 49,7 millones de euros en 2021”


El boletín diario de la Oficina de Prensa de la Santa Sede publica el siguiente comunicado de la Secretaría para la Economía, Feb-19-2021.

Comunicado de la Secretaría para la Economía, 19.02.2021

Ayer por la tarde, el Santo Padre concedió el nulla osta al Presupuesto 2021 de la Santa Sede, propuesto por la Secretaría para la Economía y discutido y aprobado el pasado martes, 16 de febrero, por el Consejo para la Economía.

Con unos ingresos totales de 260,4 millones de euros y unos gastos de 310,1 millones de euros, la Santa Sede prevé un déficit de 49,7 millones de euros en 2021, muy afectado por la crisis económica provocada por la pandemia del COVID-19.

Por primera vez, con el objetivo de dar una mayor visibilidad y transparencia a las transacciones económicas de la Santa Sede -como ha pedido repetidamente el Santo Padre-, el Presupuesto 2021 consolida el fondo del Óbolo de San Pedro y todos los fondos dedicados. Con unos ingresos de 47,3 millones de euros y unas entregas a terceros beneficiarios de 17 millones de euros, la Santa Sede espera un saldo neto de 30,3 millones de euros de estos fondos.

Excluyendo el Óbolo y los fondos dedicados, el déficit de la Santa Sede sería de 80 millones de euros en 2021. Los ingresos disminuyen un 21% (48 millones de euros) respecto a 2019, debido a la reducción de las actividades empresariales, de servicios e inmobiliarias, así como de las donaciones y contribuciones. El presupuesto también refleja un importante esfuerzo de contención de costes, con una reducción de los gastos de funcionamiento -excluidos los costes de personal- del 14% (24 millones de euros) en comparación con 2019. El mantenimiento del puesto de trabajo sigue siendo una prioridad para el Santo Padre en estos tiempos difíciles.

En consonancia con su misión, la mayor parte de los recursos de la Santa Sede en 2021 se dedicarán a apoyar las actividades apostólicas, con un 68% del total de gastos, mientras que el 17% se destina a la gestión del patrimonio y otros bienes, y un 15% a la administración y los servicios.

Si el nivel de donaciones se mantiene según lo previsto el déficit se compensará mediante el uso de parte de las reservas de la Santa Sede.

Cardenal Rodríguez Maradiaga dado de alta hospitalaria


En la tarde de ayer la oficina de comunicaciones de la arquidiócesis de Tegucigalpa, Honduras, emitió el siguiente comunicado respecto del desarrollo del estado de salud del cardenal Oscar Andrés Rodríguez Maradiaga, quien a comienzos de Febrero dio positivo para COVID-19 y se recuperaba en una clínica privada de esa ciudad.

COMUNICADO

Nos es de profundo agrado notificar a todos los fieles de la Iglesia que peregrina en la Arquidiócesis de Tegucigalpa y a todos los que en el mundo entero han estado pendientes de la salud de nuestro padre y pastor, el cardenal Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga que él ha sido dado de alta de la clínica donde se encontraba ingresado desde el pasado 3 de febrero.

Desde el momento en que puede regresar a su casa de habitación es que se ha restablecido y confiamos que dentro de poco retomará sus actividades pastorales. El que esto haya ocurrido en un lapso tan breve de tiempo debemos verlo como el producto de las oraciones que han sido escuchadas por nuestro Señor y por intercesión de Nuestra Señora de Suyapa.

Seguimos igualmente pidiendo oraciones por los otros hermanos sacerdotes que se encuentran hospitalizados y por miles de hermanos que están atravesando esta enfermedad.

Tegucigalpa, M.D.C., 18 de febrero de 2021