Biden's true colors
Unas 48 horas (en realidad menos) tardó el neopresidente gringo, Joe Biden, ‘católico practicante’, según quieren venderlo los medios masivos de comunicación, en hacer emerger su práctica ‘católica’ en asuntos tan neurales como la defensa de la vida. Ese es el individuo ‘católico practicante’ que, según la amiga de Francisco, Elisabetta Piqué, Francisco respalda.
En el justo momento de su posesión, Ene-20-2021, los obispos bergoglianos gringos, del tipo Cupich, Tobin, McElroy, se mostraron contrarios a que el actual presidente de la conferencia episcopal, el arzobispo de Los Ángeles, Mons. José Gómez, en un comunicado de prensa con ocasión de dicha posesión por parte del ‘católico practicante’ Biden, mencionara la incoherencia del neopresidente por su posición pro-aborto. Unos de esos obispos bergoglianos, no sabemos si alguno(s) de los que acabamos de nombrar, avisó a alguien en el Vaticano para que intentara, en ese caso sí, abortar la aparición del comunicado de Gómez ó, por lo menos, purgar el pasaje que tanto les disgustaba. En todo caso, el comunicado vió la luz en su forma primigenia, no sin la crítica de los obispos bergoglianos (ver aquí).
Pues, como dijimos al comienzo, no demoró mucho el ‘católico practicante’ Biden en confirmar su posición, incompatible con el catolicismo, pro-aborto, dando razón a Gómez y ridiculizando a los bergoglianos obispos. En una declaración publicada por la Casa Blanca en el aniversario de Roe vs Wade, Biden, conjuntamente con la co-presidenta Harris (dicen vicepresidenta, pero es solo un formalismo externo), mostró el verdadero rostro de su ‘catolicismo’.
Declaración del presidente Biden y la vicepresidenta Harris en el 48° aniversario de Roe v. Wade
22 DE ENERO DE 2021
Hoy se cumple el 48° aniversario del histórico fallo de la Corte Suprema de los Estados Unidos en Roe v. Wade.
En los últimos cuatro años, la salud reproductiva, incluido el derecho a elegir, ha sido objeto de ataques implacables y extremos. Estamos profundamente comprometidos para asegurar que todos tengan acceso a la atención —incluida la atención de salud reproductiva— independientemente de sus ingresos, raza, código postal, estado de seguro médico o estado de inmigración.
La Administración Biden-Harris se compromete a codificar Roe v. Wade y nombrar jueces que respeten precedentes fundamentales como los de Roe. También estamos comprometidos para garantizar que trabajamos para eliminar las disparidades de salud materna e infantil, aumentar el acceso a la anticoncepción y apoyar a las familias económicamente para que todos los padres puedan criar a sus familias con dignidad. Este compromiso se extiende a nuestro trabajo fundamental sobre los resultados de salud en todo el mundo.
A medida que la Administración Biden-Harris comienza en este momento crítico, ahora es el momento de volver a dedicarnos a garantizar que todas las personas tengan acceso a la atención médica que necesitan.
La parte de “todo el mundo” se refiere a que con los impuestos de los estadounidenses se apoyará y financiará a los abortistas fuera de Estados Unidos, muy en especial a las filiales de la multinacional del aborto, Planned Parenthood, amplia apoyadora de la candidatura Biden-Harris, ahora presidente y copresidenta, respectivamente.
Ese es el ‘catolicismo humanista’, según Piqué, que Francisco ‘respalda’, y que los obispos bergoglianos gringos en contubernio con burócratas en el vértice vaticano no quieren que sea mencionado. Son fruslerías en las que el ‘ala conservadora’ eclesial pone excesiva atención. Lo importante es que el ‘católico practicante’ Biden lleve un rosario en el bolsillo (como candidato se dejó ver varias veces con él en la mano, pero no tenemos registro de alguna ocasión en que lo estuviera orando), vaya a Misa, jure sobre una Biblia antiquísima familiar, ponga una foto suya con Francisco en su despacho, etc. Eso es lo importante como ‘católico practicante’, ¿verdad?