Sobre el fondo de esta información guardamos una cierta dosis de recelo, porque no sabemos si es que los archivos de la famosa vidente de Fátima van a ser organizados y conservados para ser publicados posteriormente ó si van a ser expurgados para hacerlos concordar con la interpretación hegemónica, no obligatoria, dada a los acontecimientos, en especial por lo que se refiere a la supuesta Consagración de Rusia al Inmaculado Corazón de María, en teoría realizada en 1984 por Juan Pablo II, y la revelación completa e integral de la tercera parte del, así llamado, secreto de Fátima.
Esta es una información del periódico Correio da Manhã, Oct-14-2020. Traducción de Secretum Meum Mihi.
El Carmelo de Santa Teresa de Coimbra anuncia hoy la creación de un grupo de trabajo que, en los próximos años, procederá a la conservación y organización archivística de todos los escritos de la Hermana Lucía. Algunos de ellos totalmente desconocidos.
Se trata de un paso fundamental para que todos los “archivos secretos” relacionados con la Vidente de Fátima, cuyo proceso de canonización se está llevando a cabo en el Vaticano, puedan ser revelados públicamente.
“Además de los diarios y de las casi cinco mil cartas que escribió, tenemos también decenas de miles de cartas que la Hermana Lucía recibió, provenientes de los cuatro rincones del mundo y de todo tipo de personas, desde el creyente anónimo, hasta gobernantes, obispos, cardenales e incluso papas”, dijo la Hermana Ana Sofía da Trindade, superiora del Carmelo de Coimbra, a Correio da Manhã.
A lo largo de su vida, y sobre todo durante los 57 años que pasó en esta casa carmelita, la Pastorcita escribió casi cinco mil cartas, constando todas ellas en la causa de canonización que se encuentra en estudio en la Congregación para las Causas de los Santos, en la Santa Sede. No siendo muchas de ellas conocidas por el público en general, pero todas han sido objeto de estudio y análisis teológico.
No se puede decir lo mismo de las cartas que recibió. Son decenas de millares y casi todas ellas se mantuvieron hasta ahora secretas. Hay cartas de gobernantes, como la filipina Corazón Aquino o del portugués Oliveira Salazar, de los papas Pío XII, Pablo VI y, sobre todo, Juan Pablo II, pero también hay cartas de religiosos que ahora son santos, como José María Escrivá de Balaguer o la Madre Teresa de Calcuta.
“Hay cartas de obispos muy importantes, que son auténticos documentos históricos, como las que le escribieron algunos obispos como Don Ernesto Sena de Oliveira de Coimbra, o José Alves Correia da Silva de Leiria Fátima.
El trabajo comienza ahora, pero la superiora del Carmelo, Sor Ana Sofía, espera que los primeros “secretos” guardados en estas cartas puedan ser revelados a finales del próximo año.