Tuesday, March 10, 2020

Retromarcha de los obispos colombianos: “No se impondrá una u otra manera de comulgar”


Así como se critíca lo malo, se reconoce lo bueno. Bien por los obispos colombianos quienes, mediante un nuevo comunicado, Mar-10-2020, han corregido el asunto aquel de que “la comunión eucarística debe recibirse en la mano”, como habían dispuesto en un comunicado de Mar-07-2020, en vista de la llegada a ese país del primer caso de persona contagiada con el Coronavirus/Covid-19.

En el punto 3 de este nuevo comunicado se lee:

Hemos invitado a comulgar preferiblemente en la mano, previa catequesis sobre la manera como se debe hacer. No obstante, también podrán comulgar en la boca quienes, por distintas razones, manifiestan su deseo y opción de recibir la Eucaristía de este modo. Como lo ha enseñado la Iglesia, no se impondrá una u otra manera de comulgar.

Ahora bien, no se puede estar al 100% de acuerdo con la nueva afirmación ya que, según la normativa vigente, SÍ es permitido negar la comunión en la mano si se corre el riesgo de irreverencia hacia el Santísimo Sacramento y/o se ocasione escándalo.

Cuando a una Conferencia Episcopal de cualquier país se le confirma, vía decreto de la CCDDS, el permiso para distribuir en ese territorio la Sagrada Comunión en la mano, se le indica claramente que se hace a la luz de la Instrucción Memoriale Domini y la carta anexa a esa misma instrucción, según consta en AAS 61 [1969] pp. 541-547.

Esa carta comienza claramente advirtiendo:

Recordando lo que en este punto dice la Instrucción del 29 de mayo de 1969, sobre el mantenimiento en vigor del uso tradicional, el Santo Padre ha tomado en consideración los motivos invocados en vuestra petición y los resultados de la votación hecha con este objeto. Está de acuerdo en que en el territorio de vuestra Conferencia Episcopal, cada Obispo, según su prudencia y su conciencia, pueda autorizar en su diócesis la introducción del nuevo rito para distribuir la comunión, a condición de que se evite toda ocasión de escándalo por parte de los fieles y el peligro de irreverencia hacia la Eucaristía.

Es decir, si las condiciones, que hemos resaltado arriba, no se cumplen, es perfectamente posible negar la Comunión en la mano.

Coronavirus/Covid-19: Vaticano cerrado


Información del Boletín diario de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Mar-10-2020.

Comunicado de la Oficina de Prensa de la Santa Sede , 10.03.2020

En coordinación con las normas establecidas por las autoridades italianas, se han adoptado hoy varias medidas adicionales para evitar la propagación del coronavirus.

A partir de hoy, la Plaza y la Basílica de San Pedro están cerradas a las visitas guiadas y a los turistas.

La farmacia y el supermercado siguen abiertos, pero con entradas reglamentadas.

También a partir de hoy, como medida de precaución, permanecerán cerrados la unidad móvil de Correos Vaticanos en la Plaza de San Pedro, los dos puntos de venta de la Libreria Editrice Vaticana, el Servicio Fotográfico de L'Osservatore Romano, que permanecerá accesible en línea, y la tienda de ropa.

El comedor de empleados estará cerrado al público a partir de mañana, 11 de marzo, cuando se activará, en cambio, un servicio de reparto de comidas a petición de los distintos organismos y entes de la Santa Sede y del Estado de la Ciudad del Vaticano.

Estas medidas permanecerán en vigor, excepto en el caso de nuevas indicaciones, hasta el 3 de abril de 2020.

Secretario de los obispos colombianos admite: “Entendemos que hay algunos fieles que de ninguna manera comulgarían en la mano, entonces les asiste el derecho de pedirla en la boca”


¡Bravo, su excelencia!, pero, ¿y por qué demonios no escribieron eso en su comunicado inicial?

El Secretario de la Conferencia Episcopal de Colombia, Mons. Elkin Alvarez, entrevistado para Noticias RCN, Mar-10-2020, ha dicho respecto de el pedido (imposición) de la recepción de la Comunión en la mano, la cual se especificaba para los fieles en un comunicado de Mar-07-2020:

Queremos que todos los fieles sean muy conscientes y que reciban esta recomendación y que de verdad las practiquen, pero entendemos que hay algunos fieles que de ninguna manera comulgarían en la mano, entonces les asiste el derecho de pedirla en la boca...

Las cosas se deshacen de la misma manera en que se hacen. No es con entrevistas individuales como se arregla el entuerto, lo lógico es que la Conferencia Episcopal de Colombia publique por los mismos medios y con el mismo despliegue lo que el Sr. Secretario ha declarado a un medio de comunicación. Pero, sobre todo, insistan a los sacerdotes que no pueden negar la Sagrada Comunión a los fieles que deseen recibirla en la boca.


Video cortesía de Wilson Tamayo, vía Twitter.


Actualización Mar-10-2020 (16:25 UTC): Este es el video completo y en mejor calidad de la entrevista arriba aludida.



Entradas Relacionadas: Retromarcha de los obispos colombianos: “No se impondrá una u otra manera de comulgar”.

Coraje hay, solamente que...



“Oremos al Señor también por nuestros sacerdotes, para que tengan el coraje de salir y acudir a los enfermos, llevando la fuerza de la Palabra de Dios y la Eucaristía y acompañen a los trabajadores sanitarios, los voluntarios, en este trabajo que están haciendo” ha dicho Francisco hoy antes de la Misa desde la capilla de la Domus Sanctae Marthae, con la novedad de haber sido la segunda transmitida en su totalidad vía streaming.

¿Y cómo podría ser un ejemplo de dicho ‘coraje’? La siguiente es una versión libre, salida de nuestra imaginación. Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia.

Suena el teléfono de despacho parroquial y/o rectoría de cualquier lugar del planeta. Al no haber nadie que responda debido a la cuarentena impuesta por el estado (cualquier estado, introduzca aquí el nombre del país de su preferencia, para el caso es lo mismo), es el propio párroco el que toma la llamada, la cual resulta ser de una feligresa hija de un octogenario enfermo y que desea confesarse, recibir la unción de los enfermos (anteriormente llamada extremaunción) y recibir la Sagrada Comunión. Como Francisco en su video-Misa vía streaming desde la Domus Sanctae Marthae el Martes, Mar-10-2020, ha instado a los sacerdotes a que visiten a los enfermos y les lleven la Eucaristía, se ha sentido animada esta feligresa a llamar a su párroco.

Sacerdote: Hola.

Feligresa: Hola. Por favor, estoy buscando al Sr. Párroco, el P. xxx.

Sacerdote: Sí Sra., él habla. A sus órdenes.

La feligresa pasa a identificarse, explicarle la situación al párroco y le solicita la visita a su domicilio para los fines propuestos.

Sacerdote: No hay ningún inconveniente, solo que...

Feligresa: ¿Qué cosa, Padre?

Sacerdote: Pues que yo solamente iría si tuviera para mi uso el tapabocas N-95, el cual según las indicaciones de las autoridades sanitarias es el que brinda mayor protección. Infortunadamente no se consiguen, y si se llegan a conseguir los precios son estratosféricos. ¿Tiene Ud. alguno en casa, por casualidad?

Feligresa: No señor. Y, como dice Ud., están por la nubes, ¿con qué dinero podríamos adquirir uno si a duras penas tenemos para subsistir?

Sacerdote: ¡Vea Ud. que contrariedad! No sé qué hacer, pero le ratifico mi total disposición de visitar a su Padre, solamente que no tengo las garantías.

Feligresa: Sí, Padre, pero, ¿y la invitación de hoy de Francisco a que los sacerdotes visiten a los enfermos?

Sacerdote: El Santo Padre dio solamente un marco general, pero eso no tiene nada que ver con ignorar la observancia de las mínimas medidas sanitarias. Le repito, Yo gustoso voy pero...

Feligresa: Perdone que insista, Padre, ¿y en que queda eso que dijo Jesús de que el buen pastor da la vida por sus ovejas?

Sacerdote: Bueno, vea Ud., en tiempos de Jesús no había grabadoras, entonces no hay certeza objetiva de que eso fuera exactamente lo que dijo. Además, sepa Ud. que en tiempos de Jesús no existía el Covid-19.

Feligresa: ¿Cómo? Bueno, pero, ¿y entonces en qué queda lo del favor por el cual lo he llamado, de venir a administrarle los sacramentos a mi papá?

Sacerdote: Ya se lo he dicho, voluntad la tengo toda, pero si no se puede cumplir las medidas sanitarias...

Feligresa: ¿Eso quiere decir que no viene Ud. entonces?

Sacerdote: Ya se lo he dicho, voy presuroso, pies me faltan para asistir a un feligrés mío que me requiere, pero si las condiciones sanitarias no se dan, pues no se puede. Le recalco, falta de voluntad no es, ¡ehh!

Feligresa: ¿Y entonces...?

Sacerdote: Pues vuelva a llamar cuando mejoren las condiciones, porque por el momento no es posible.

Feligresa: ¿Y si mi padre muere antes de eso?

Sacerdote: No sea Usted tan fatalista, Sra. ¿Acaso no confía Ud. en la Divina Providencia?

Feligresa: Eso mismo le pregunto yo a Ud.

Sacerdote: ¿¡Bueno!?, ¿¡hola!? Parece que se perdió la señal. ¿Me escucha Usted, Sra.?, ¡aló!...