Saturday, February 22, 2020

Viri Probati: ¿A quién le pasarán el testimonio?


Mons. José Antonio Canales, Obispo de Danlí, Honduras, entrevistado por la cadena radial Blu Radio de Colombia, Feb-13-2020, indagado si creía que Francisco cerró la puerta a la posibilidad de la ordenación de hombres casados con “Querida Amazonia” (audio completo de la entrevista empotrado).

¿Usted cree que con esto se cierra la posibilidad del celibato opcional para los presbíteros?

No, Yo pienso que es ahora que se hizo esta revisión en el caso del territorio de la Amazonia, pero la Iglesia camina, tiene dos mil años y pues no sabemos qué pueda hacer la iluminación del Espíritu Santo hoy, mañana o pasado mañana. Entonces Yo esto de cerrar no digo que así sea, sino que la Iglesia vive el momento y en este momento pues el Papa pidió que continuara la vida de la Iglesia de la Amazonía de tal forma que todos, hombres y mujeres que viven entregados y comprometidos con la pastoral allá, puedan suplir de alguna manera la ausencia de la figura sacerdotal.

No es por casualidad que hayamos escogido la opinión de un obispo de Centroamérica respecto de que en la exhortación apostólica postsinodal “Querida Amazonia”, Francisco cerró o no la puerta a la ordenación de hombres casados. Muchos otros obispos del globo han opinado parecido a lo que opina Mons. Canales, ¿por qué fijar la atención justo en esa opinión? Por lo que intentaremos exponer seguidamente.

En Septiembre de 2019 se informaba del nacimiento de un nuevo organismo llamado “Red Eclesial Ecológica Mesoamericana, REEMAM”. Según informó el CELAM en su sitio de internet, “La REEMAM debe convertirse en un instrumento pertinente en ámbitos como la búsqueda de justicia, legalidad; en el marco de la promoción y tutela de los derechos humanos; por lo que ha de fomentar la cooperación entre iglesias e instituciones públicas de diferente nivel. Es preciso trabajar por la cooperación para fomentar un desarrollo económico inclusivo y equitativo; así como la conciencia del uso responsable y solidario de los recursos naturales, preservando las culturas y modos de vida tradicional de los pueblos que constituyen la región”. Como puede notarse, la descripción de los objetivos es lo bastante ambigüa como para que dentro de ellos quepa cualquier cosa, aunque no sea tan evidente su relación con ellos.

En Enero de 2020 se creó el capítulo Panamá de dicho organismo, según informaba el comunicado final de la Conferencia Episcopal de Panamá tras la 211ª asamblea plenaria.

A nosotros la creación de esa red se nos asemeja mucho a la creación de la Red Eclesial Panamazonica, REPAM. Y lo que nos inquieta es saber los verdaderos móviles para su creación. En el caso de la conocida REPAM, era solo una tapadera o fachada, porque lo que en realidad sucedió es que de antemano se fijaron unos objetivos inamovibles y solamente después se empezó a crear todos los mecanismos necesarios en vistas a alcanzar esos objetivos. Uno de los engranajes de dicho mecanismo era REPAM. Ese organismo, con la financiación, entre otros, del dinero de los obispos alemanes, logró hacer creer que fue de la propia Amazonía de donde nacieron las propuestas que se trabajaron en el Sínodo Extraordinario para la Región Panamazonica de Octubre de 2019, como la de la ordenación sacerdotal para hombres casados, las diaconisas, el rito amazónico, por nombrar solamente las más mentadas (la de las hostias de yuca u otras no lo fueron tanto).

Si se tiene en cuenta que Francisco ha dicho que el documento final del Sínodo para la Amazonía se debe aplicar, es decir, está vivo, no sería descabellado pensar que por medio de la nueva REEMAM se trasplante a Centroamérica (nótese que decimos ‘Centroamérica’, porque a pesar de autodenominarse ‘Mesoamericana’, comprende más allá de lo que en estricto sentido se entiende por tal) varios de los objetivos que quedaron por cumplirse, por ahora, en la Amazonía.

Teoricemos que, por decir cualquier cosa, y con el prurito de la novedad esa de la ordenación de hombres casados, se intente trasplantarla de la Amazonia a Centroamérica, se empiece a crear el ambiente para que los centroamericanos se vayan haciendo a la idea, se les bombardee con ese embeleço al punto que logren que sean ellos los que la propongan. ¿Se les parece a alguna situación ya conocida?

Bueno, casualmente en esa región ya hay el insumo necesario, ¡qué casualidad!, en una diócesis, la cual hemos nombrado en otras ocasiones, ya existe una cantidad desbordante, una hiperinflación de diáconos permanentes. Pero no cualquier clase de diáconos permanentes, se trata de diáconos indígenas, y por supuesto estamos hablando de la diócesis de San Cristóbal de las Casas en México.

Cuando en el pasado, hace unos 25 años, comenzó a darse la hiperinflación de diáconos en esa diócesis, dijeron que no, que no era una forma de presionar para que en un futuro esos diáconos accedieran a la ordenación sacerdotal. Fuera convincente o no el argumento, de todas maneras Juan Pablo II tomó cartas sobre el asunto (ver aquí), y después Benedicto, prohibiendo que se ordenaran más diáconos de los que ya existían. Dichas decisiones luego fueron revocadas por ya saben quién: Francisco. Una especie de ‘desagravio’ al díscolo obispo que comenzó todo el berenjenal, fue que durante su visita a México, Francisco rezó sobre su tumba.

Y bien, ya estamos en el futuro, allí están esos diáconos permanentes, y como hay necesidad, ¿por qué no echarles mano? Y como ya ha sido creada la matriz de opinión sobre el tema de la ordenación para los hombres casados, solamente hay que hacer el énfasis para la región de Centroamérica. Y como para ayer fue tarde, pues que sea un obispo de esa área el que se ponga manos a la obra.


Entradas Relacionadas: “Querida Amazonia”: Debes pasar el testimonio, por ahora no viri probati ni diaconisas.