Saturday, September 07, 2019

Nombramiento de los Presidentes Delegados de la Asamblea Especial del Sínodo de los Obispos para la Región Pan-Amazónica

Información del boletín diario de la Oficina de Prensa, Sep-07-2019.

Nombramiento de los Presidentes Delegados de la Asamblea Especial del Sínodo de los Obispos para la Región Pan-Amazónica

El Santo Padre, en vista de la Asamblea Especial del Sínodo de los Obispos para la Región Pan-Amazónica que se celebrará en el Vaticano del 6 al 27 de octubre de 2019, sobre el tema: Amazonía: nuevos caminos para la Iglesia y para una ecología integral, ha nombrado Presidentes Delegados a S.E. los cardenales:

- Baltazar Enrique Porras Cardozo, Administrador apostólico "sede vacante et ad nutum Sanctae Sedis" de Caracas, arzobispo de Mérida (Venezuela).

- Pedro Ricardo Barreto Jimeno, S.I., Arzobispo de Huancayo (Perú), Vicepresidente de la Red Eclesial Pan-Amazónica (REPAM);

- João Braz de Aviz, Prefecto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica.

Sínodo para la Amazonía: El nuevo humanismo es una moda peligrosa, artículo del Prof. Ettore Gotti Tedeschi

Este es un artículo firmado por el Prof. Ettore Gotti Tedeschi, antiguo director del IOR —y que salió de allí echado casi como un perro—, más recientemente conocido por haber sido matriculado entre los supuestos opositores de Francisco, publicado en el periódico La Verità, Sep-07-2019, pág. 13. Traducción de Secretum Meum Mihi.

VISIÓN PAGANA
El nuevo humanismo es una moda que causará graves daños

El nuevo humanismo es una moda peligrosa

La asamblea de obispos sobre la Amazonía busca introducir también en la cristiandad la tonada filosófica del momento

El riesgo es el de ceder a un elogio acrítico de las culturas indígenas y a una visión ecológica más pagana que evangélica

por ETTORE GOTTI TEDESCHI


Hay una palabra mágica que flota continuamente y en todas partes, se imponen y confunde nuestros intelectos: “Nuevo humanismo”. Esta palabra viene hoy, curiosamente, reutilizada concomitantemente en moral, en economía y en política. Específicamente, con referencia al sínodo amazónico, en referencia a la conferencia Asís 2020 (“Economy of Francesco”) y en referencia a los programas del nuevo gobierno guiado por el profesor [Giuseppe] Conte. Se utiliza para el sínodo amazónico augurando un nuevo humanismo ecológico, que en realidad se asemeja a un cierto humanismo pagano vivido en un estado de naturaleza pura. Se utiliza en economía, prometiendo, en la conferencia Asís 2020, un nuevo humanismo civil, para una economía relacional, cooperativa, distributiva, inclusiva, fraterna, no centrada en el lucro, etc.

También es utilizada en política proponiendo un nuevo humanismo como horizonte de valores para una sociedad sin desigualdades, con un nuevo concepto de un bien común más global que particular, garantizado por la política que debe volver a gobernar la economía. Ergo, debemos esperar un nuevo humanismo ecológico, espiritual, económico, político, muy humano, muy social y quizás incluso un poco pagano. Para tratar de buscar comprender las consecuencias sugiero no subvalorar el desarrollo del Sínodo del Amazonas que se celebrará desde el próximo 6 de octubre en Roma. Podría ser equivalente a un Concilio no oficial, con posibles efectos (ciertamente no deseados y previstos por el sínodo) dignos de atención. De hecho, detrás de reivindicaciones muy “naturales”, esperadas desde el momento en que se habla públicamente sobre la necesidad de una religión universal y ambientalista, podrían esconderse proyectos económicos de un nuevo capitalismo “verde”, tal vez incluso orientados hacia el progresivo decrecimiento de la población y del desarrollo. La sospecha nace verificando la inconsistencia lógica de un silogismo aristotélico entre premisas, consideraciones y conclusiones (predecibles). De hecho, las premisas “científicas”, económicas y morales, no son compartidas en absoluto y muchas se consideran arbitrarias. Las consideraciones del sínodo, por muchos teólogos, incluso se consideran heréticas y se centran en una muestra (la Amazonía), pero podrían extenderse a todo el mundo.

Las consideraciones sobre las soluciones económicas son incluso utópicas. Las consideraciones políticas finalmente son impuestas. Las conclusiones no pueden ser más que consiguientemente arbitrarias, destinadas a generar efectos impredecibles, sea en materia moral, como económica, como política. El defecto lógico confirma la conclusión sospechada de que el verdadero objetivo pueda ser la preparación de una revolución capitalista ecológica, verde, que cambiará el poder en todo el mundo y generará no pocas “insatisfacciones”. Esta revolución capitalística, que por lo tanto solo podría ser “business”, declara fundarse sobre la necesidad de un nuevo humanismo, más humano, y quiere consensuar la autoridad moral y la política. Ciertamente entenderemos mejor después del sínodo, después de Asís 2020 y después de comprender el programa de gobierno, pero concederemos, como confirmación, una explicación lógica doble deductiva. Primero: si el sínodo parte del presupuesto (no suficientemente explicado científicamente) que la prioridad es el cuidado de lo creado (ejemplo amazónico) y que las culturas ancestrales (religiones paganas) respetan la naturaleza más que las religiones “evolucionadas”, se puede esperar que se concluya que no hay más verdades que proponer, sino libertad de respetar, y que el naturalismo es la verdad. De ahí el nuevo humanismo ecológico que quiere al hombre sujeto a la tierra y sujeto solo a las leyes naturalistas, sin verdad y moral absoluta, donde la moral y la ética hacen el cuidado de la tierra. Esto hace que la revolución green pueda ser propuesta y aceptable.

Segundo: si el viejo capitalismo, ha sido predatorio, genocida, codicioso, consumista, etc. y solo ha buscado la maximización de las ganancias para unos pocos, sin distribuir la riqueza producida y ha esclavizado la política al mercado (distorsionando el humanismo para el hombre), el nuevo capitalismo propuesto debe hacer lo contrario, no debe maximizar las ganancias, pero debe distribuir riqueza, y la política debe funcionar para que suceda por el bien común global. El nuevo humanismo, declarado por las tres partes, interpreta la vida en clave científico-biológica, parecería fundarse en sobre el redimensionamiento del papel del hombre en lo creado, podría interrumpir el crecimiento económico, negar la parte más importante del Génesis y reafirmar un nuevo humanismo de inspiración cátara.

Quien gobernare con éxito será aquel que tuviere como programa lo “ecológico”, facilitará la inmigración de inmigrantes (incluso animistas, tipo amazónico) que traerán diferentes culturas, incluso ancestrales, promoviendo el sincretismo incluso con religiones paganas para balancear lo monoteísta. Con el rosario a un lado, ¿se mostrarán imágenes de ídolos paganos del nuevo humanismo?