Friday, August 17, 2018

Obispos de EEUU piden al Vaticano visita apostólica sobre escándalos de abusos sexuales


Información de agencia DPA, Ago-16-2018.

MADRID.- El presidente de la Conferencia Episcopal de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB), el cardenal Daniel N. DiNardo, ha anunciado este jueves que va a invitar al Vaticano a realizar una Visita Apostólica para que investigue el escándalo por presunto encubrimiento de casos de abusos sexuales por parte del arzobispo emérito de Washington Theodore McCarrick.

El purpurado, que también se ha referido al escándalo en Pensilvania, ha calificado los hechos de "catástrofe moral", según informa la USCCB en un comunicado.

"Hace dos semanas, compartí con ustedes mi tristeza, enojo y vergüenza por las recientes revelaciones sobre el arzobispo Theodore McCarrick. Esos sentimientos continúan y se profundizan a la luz del informe del Gran Jurado de Pensilvania. Nos enfrentamos a una crisis espiritual que requiere no solo conversión espiritual, sino también cambios prácticos para evitar repetir los pecados y fallas del pasado que son tan evidentes en el informe reciente. A principios de esta semana, el Comité Ejecutivo de la USCCB se reunió de nuevo y estableció un resumen de estos cambios necesarios", ha declarado.

Los prelados estadounidenses quieren llevar a cabo una investigación completa sobre el caso del arzobispo emérito para evitar que se repita, y así ayudar a proteger a menores, seminaristas y otras personas vulnerables en el futuro. Por ello, invitarán al Vaticano a llevar a cabo una Visita Apostólica para responder a estas preguntas, junto con un grupo de personas en su mayoría laicas identificadas por sus miembros por la Junta Nacional de Revisión y facultadas para actuar.

Además, plantean la una apertura de canales nuevos y confidenciales para informar sobre quejas contra obispos así como una defensa para una resolución más efectiva de quejas futuras. Estos tres objetivos se perseguirán según tres criterios: independencia propia , autoridad suficiente y liderazgo sustancial de los laicos.

"Ya hemos comenzado a desarrollar un plan concreto para lograr estos objetivos, confiando en la consulta con expertos, laicos y clérigos, así como con el Vaticano. Presentaremos este plan a todo el cuerpo de obispos en nuestra reunión de noviembre. Además, viajaré a Roma para presentar estos objetivos y criterios a la Santa Sede e instar a que se adopten más medidas concretas en función de ellos", añade el presidente de los obispos.

El objetivo principal en todo ello es, según explica, una protección más fuerte contra los "depredadores" en la Iglesia y cualquiera que los oculte, protecciones que mantendrán a los obispos bajo los más altos estándares de transparencia y responsabilidad.

"Me disculpo y pido humildemente su perdón por lo que mis hermanos obispos y yo hemos hecho y no hemos podido hacer. Cualesquiera que sean los detalles sobre el Arzobispo McCarrick o los muchos abusos en Pensilvania (o en cualquier otro lugar), ya sabemos que una de las causas principales es el fracaso del liderazgo episcopal", agrega. Finalmente, admite que llevará tiempo reconstruir la confianza en los obispos "dañada por estos pecados y fracasos pasados".

Debemos decir que esta información es anterior en horas al pronunciamiento que hizo el Vaticano, con lo que el último puede entenderse como una primera respuesta a los Sres. obispos de EEUU.

Francisco habría decidido prescindir de los cardenales Pell y Errázuriz en su C-9. Maradiaga afianzado

Advertimos que el que ha lanzado la primera especie es bergogliano de hueso colorado, por lo que no sabemos si escribe con el deseo lanzándole un mensaje a Francisco ó, como sostiene y debería ser, lo hace basado en información fidedigna obtenida.

Este es un artículo de El Diario.es, Ago-16-2018.

El Papa expulsa a dos de sus asesores por casos de pederastia en pleno escándalo por los abusos de sacerdotes en EEUU

• Francisco dejará de contar con los cardenales George Pell y Francisco Javier Errázuriz para el grupo C-9, que le asesora en la reforma de la Curia romana

• El primero, jefe de las finanzas del Vaticano, está inmerso en un juicio en Australia por abusos y el segundo está acusado por las víctimas de la Iglesia en Chile de encubrir a un sacerdote ya condenado

•Precisamente esta semana la Corte Suprema de Pensilvania (EEUU) ha dado a conocer un extenso informe que acusa a 300 sacerdotes de pederastia en seis diócesis

Jesús Bastante

16/08/2018


Francisco ha decidido dejar de contar con dos de los cardenales que están participando en la reforma de la Curia vaticana. Implicados en sendos casos de pederastia, los cardenales George Pell y Francisco Javier Errázuriz serán expulsados del denominado C-9, según ha podido saber eldiario.es. Esta comisión está formada por un grupo de colaboradores que asesoran al Papa en la redacción de una nueva Constitución Apostólica, lo más parecido a una Constitución de la Santa Sede. Los abusos sexuales a menores siguen marcando a la Iglesia en una semana en la que se ha hecho público un informe judicial que acusa a más de 300 sacerdotes por hechos de este tipo en el Estado de Pensilvania (EEUU).

Este mismo miércoles comenzaba en Australia el juicio contra el cardenal George Pell, jefe de las finanzas del Vaticano –actualmente en excedencia–, que se enfrenta a "múltiples" acusaciones a lo largo de varias décadas por abuso sexual infantil. El proceso comenzó después de que Pell declarara en varias ocasiones en la comisión oficial que investigó de 2013 a 2017 la respuesta de la Iglesia en Australia a las acusaciones de pederastia cometida en su seno. Finalmente llegó a la conclusión de que en ese país hay "decenas de miles de víctimas".

Casi al mismo tiempo que daba comienzo el juicio, la Corte Suprema de Pensilvania daba a conocer un extenso informe que documenta 1.000 casos en seis diócesis y acusa a 300 sacerdotes. "Sabemos que ya han oído hablar de casos como este. Ha habido otros informes sobre el abuso sexual a niños dentro de la Iglesia Católica. Pero nunca a esta escala", arranca el documento que acredita cómo durante más de 70 años la Iglesia ha ocultado estos casos trasladando a los presuntos agresores de una diócesis a otra e intentando silenciar a las víctimas.

Mientras, la justicia de Chile sigue en plena investigación por los casos denunciados en el seno de la Iglesia, a la que pertenece el otro de los miembros del C-9 expulsados por Bergoglio. El cardenal Francisco Javier Errázuriz ha sido denunciado por las víctimas de Fernando Karadima, ya condenado, como uno de los obispos que, desde el principio, encubrió a los abusadores y amenazó a las víctimas. El Papa sella con la expulsión de Errázuriz un gesto después del escándalo surgido tras su viaje al país hace unos meses, cuando desconfío de las víctimas que acusaban a otro sacerdote, Juan Barros, de encubrimiento.

Poco después Bergoglio rectificó y admitió "graves equivocaciones", lo que motivó la reapertura de la investigación que ha llevado a la renuncia en bloque de todos los obispos chilenos tras una reunión con el Papa en el Vaticano celebrada el pasado mayo.

El escándalo de la Iglesia chilena, en la que al menos un tercio de sus obispos ha sido acusado de encubrimiento, ha motivado una investigación detallada de la Fiscalía, que el 21 de agosto ha citado como imputado al cardenal de Santiago de Chile, Ricardo Ezzati, y se plantea hacer lo mismo con Errázuriz. Ambos, hombres de confianza de quien fuera Secretario de Estado del Vaticano con Juan Pablo II, Angelo Sodano, son según la investigación algunos de los máximos responsables de la dinámica de ocultación de la pederastia en el país.

El C-9, en plena reforma

La expulsión de Pell se producirá de inmediato y ya no estará presente en la próxima reunión del grupo C-9, prevista para los próximos 11 a 13 de septiembre en el Vaticano. En el caso de Errázuriz es previsible que tampoco, pero este extremo no ha sido confirmado.

El denominado C-9 es un grupo de colaboradores del que se dotó Bergoglio hace tres años para asesorarle en la reforma de la Curia y que volverán a reunirse ya con el borrador de la nueva Constitución Apostólica –lo más parecido a una Constitución de la Santa Sede–, que llevará por nombre Praedicate Evangelium (Predicar el Evangelio) y que sustituirá a la Pastor Bonus implantada por Juan Pablo II.

El objetivo es que estas normas se conviertan en texto oficial de la Iglesia en marzo de 2019, coincidiendo con el sexto aniversario de la elección de Francisco como Papa. Un trabajo que ha contado con numerosas oposiciones (desde el caso Vatileaks a filtraciones de documentación de todos los organismos vaticanos), pero que el Papa parece decidido a culminar.

La reforma del C-9 no se quedará solo en la expulsión de Pell y Errázuriz, sino que incluirá a varios canonistas en el grupo de asesores, cuyo cometido sería el de interpretar legalmente las ideas, mecanismos y reglas apuntadas por el C-9, pues ninguno de los actuales miembros tiene estudios canónicos detallados. En este punto, gana puntos la figura del obispo de Albano, Marcello Semerano, quien coordinaría a un equipo de canonistas para apuntalar el documento.

Junto a las de Pell y Errázuriz, el Papa también podría plantear la marcha del arzobispo de Kinshasa, Laurent Monsengwo, por cuestiones de edad (tiene 79) y por la delicada situación en la República Democrática del Congo, donde algunas entidades le han pedido, incluso, que presente su candidatura a la presidencia del país.

Así las cosas, del grupo original se mantendrían el cardenal hondureño Rodríguez Maradiaga, actual coordinador, y una de las personas de la máxima confianza de Bergoglio: el secretario de Estado, Pietro Parolin; el alemán Reinhard Marx, uno de los mayores defensores del fin del celibato y la intercomunión con los protestantes; el estadounidense O'Malley, arzobispo de Boston y presidente de la Comisión Antipederastia del Vaticano; Oswald Gracias, arzobispo de Bombay; y Giuseppe Bertello, gobernador del Estado de la Ciudad del Vaticano.

¿Quiénes podrían ocupar el puesto de los cardenales que cesen? Entre las quinielas, destacan la posible incorporación del cardenal de Manila y presidente de Cáritas Internationalis, Luis Antonio Tagle (al que algunos colocan como posible sucesor de Francisco); o el ghanés Peter Turkson, actual Prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, que se ocupa de la lucha contra la pobreza, por los migrantes y contra la desigualdad en el mundo. Algunas voces, incluso, plantean que el Papa querría otra voz en castellano en su grupo de asesores: en esta tesitura, un cardenal español podría tener hueco en el C-9: Juan José Omella (Barcelona) o Carlos Osoro (Madrid).

Ahora bien, los cambios en el C-9 ya estan previstos, según un análisis de otra fuente bergogliana, concretamente el blog Il Sismografo, Ago-07-2018. En él se resalta, por ej., que ya el propio Francisco hablaba de algunos cambios en su reciente entrevista exclusiva a Reuters, además de citar los nombres de aquellos que podrían salir de dicho consejo, entre ellos los dos arriba mencionados en el artículo. Hacemos notar ello porque en la fecha de dicho análisis no se conocía todavía el escándalo de abusos surgido esta semana en Pensilvania, EEUU. Es decir, si iban a salir, era una decisión ya tomada por otros motivos en nada relacionados, como afirma el artículo arriba transcrito, con el caso de Pensilvania, EEUU.

Aprovechando que estamos en ello, otro de los que se venían nombrando dentro de los candidatos a salir del C-9, card. Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, parece más bien afianzarse, porque el recientemente nombrado Sustituto de la Secretaría de Estado sería de su cuerda.

Edward Pentin, en su cuenta de Twitter ha lanzado este llamativo trino.

Fuentes confiables: nuevo sustituto +Peña Parra es “muy cercano amigo” de ambos ++Maradiaga y el [caído en] desgracia auxiliar Pineda. La fuente: “Este nombramiento lleva la marca de Maradiaga quien todavía tiene gran poder” y con [un] “sólo soplo” ha asegurado su propio “trono” y el sucesor de Pineda

Y luego este otro trino.

Como diplomático en la nunciatura en Honduras 2002-2005, el nuevo sustituto +Edgar Peña Parra forjó muy cercanas amistades con Pineda y ++Maradiaga y trabajó para tener a Pineda nombrado auxiliar en 2005. Como sustituto se espera que él haga todo lo que Maradiaga le pida que haga, dicen las fuentes.


Entradas Relacionadas: Card. Errázuriz asegura no estar informado de haber sido excluido del C-9.

Vaticano se pronuncia sobre informe de escándalo de abusos sexuales en Pensilvania, EEUU


El pronunciamiento que vamos a reproducir a continuación, fue emitido tarde en la noche de ayer (hora de Roma), por ello tiene fecha de Ago-16-2018. Dicho pronunciamiento viene publicado bajo el título “Declaración del Director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Greg Burke, 16.08.2018”, con la advertencia de que se trata de una “traducción no oficial”.

Ante el informe que se ha hecho público en Pensilvania esta semana, hay dos palabras que pueden expresar los sentimientos frente a estos horribles crímenes: vergüenza y dolor.

La Santa Sede toma muy en serio el trabajo del Investigating Grand Jury de Pensilvania y el largo Interim Report que ha elaborado. La Santa Sede condena inequívocamente el abuso sexual de menores.

Los abusos descritos en el informe son criminales y moralmente reprobables. Estos hechos han traicionado la confianza y han robado a las víctimas su dignidad y su fe. La Iglesia debe aprender duras lecciones de su pasado, y debería haber asunción de responsabilidad (accountability) tanto por parte de los abusadores como por parte de aquellos que permitieron que se produjera.

La mayor parte del informe se refiere a abusos cometidos antes de los primeros años 2000. No habiendo encontrado apenas casos después de 2002, las conclusiones del Grand Jury son coherentes con estudios precedentes que muestran cómo las reformas hechas por la Iglesia Católica en Estados Unidos han reducido drásticamente la incidencia de los abusos cometidos por el clero. La Santa Sede empuja a estar en constante reforma y vigilancia en todos los niveles de la Iglesia Católica, para garantizar la protección de los menores y de los adultos vulnerables. Subraya también la necesidad de obedecer a la legislación civil, incluida la obligación de denunciar los casos de abusos a menores.

El Santo Padre comprende bien cuánto pueden sacudir la fe y el ánimo de los creyentes estos crímenes, y reitera el llamamiento a hacer todos los esfuerzos posibles para crear un ambiente seguro para los menores y los adultos vulnerables en la Iglesia y en toda la sociedad.

Las víctimas deben saber que el Papa está de su parte. Aquellos que han sufrido son su prioridad, y la Iglesia quiere escucharlos para erradicar este trágico horror que destruye la vida de los inocentes.