Como hemos advertido en otras ocasiones, por allá en los sacros palacios han venido pisando el acelerador en todos los órdenes, parece urgirles algo. Hay que acelerar la reforma de la Misa ecuménica, hay que acelerar lo del diaconado femenino, hay que acelerar lo de la ordenación de hombres casados, hay que acelerar el acceso de los adúlteros a la Sagrada Comunión y ahora el de los Protestantes, etc, etc, etc.
Hace un año, dos de los más prominentes escuderos de Francisco, Antonio Spadaro y Marcelo Figueroa, atacaban en La Civiltà Cattolica a los conservadores gringos (Evangélicos y Católicos), a Trump y a los Estados Unidos, en una movida evidentemente con la complacencia del Vaticano, sin cuya aprobación no aparece la revista (ver aquí y aquí). Más concretamente, sin el visto bueno de la Secretaría de Estado.
Pues bien, el afán les ha llegado también en ese área, por lo que nuevamente exactamente las mismas personas han regresado a la carga al publicar el artículo “Teología de la prosperidad: El peligro de un evangelio diferente” (en el original escriben “evangelio”, así con minúscula).
Este es un despacho de agencia Associated Press, Jul-18-2018. Traducción de Secretum Meum Mihi (al momento de traducir conocíamos la primera versión, ofrecemos disculpas si el artículo ha sido reeditado luego de ello).
Revista con visto bueno del Vaticano ataca nuevamente a los Evangélicos de EEUU
CIUDAD DEL VATICANO (AP) - Una revista aprobada por el Vaticano ha lanzado su segunda gran crítica de los evangélicos estadounidenses, descartando la teología del “evangelio de prosperidad” como una “pseudo” fe atada peligrosamente al sueño americano y las políticas del presidente Donald Trump.
Dos de los principales asesores de comunicación del Papa Francisco —un Jesuita italiano y un Protestante argentino— escribieron “Teología de la prosperidad: El peligro de un evangelio diferente” para el número actual de la revista jesuita La Civiltà Cattolica, publicado el miércoles.
En el artículo, los autores señalan que el “evangelio de la prosperidad” y su creencia de que Dios quiere que sus seguidores sean ricos, saludables y felices se ha extendido por todo el mundo, particularmente en América Latina y Asia, gracias al uso efectivo de la televisión y los medios de comunicación de sus carismáticos defensores.
Pero apuntan a sus orígenes en los Estados Unidos y a su apuntalamiento del sueño americano.