Friday, March 17, 2017

Mons. Arthur Roche explica motivaciones para vísperas anglicanas en la Basílica de San Pedro


La agencia Zenit presenta un artículo basado en una entrevista con Mons. Arthur Roche, secretario de la Congregación para el Culto Divino y Disciplina de los Sacramentos, de cuya presencia en las recientes vísperas anglicanas en la Basílica de San Pedro nos preguntabamos. Hubieramos preferido leer la entrevista en sí misma, pero no habiendo más este es el artículo.

(ZENIT- Roma).- Un nuevo paso importante en el camino ecuménico se ha registrado este lunes 13 de marzo, en la basílica de San Pedro: la recitación de las vísperas anglicanas.

Ha presidido la oración el arzobispo anglicano David Moxon, director del Centro Anglicano de Roma, mientras que Mons. Artur Roche, secretario de la Congregación para el Culto Divino y la disciplina de los Sacramentos realizó la homilía. El coro del Merton College de Oxford acompañó la liturgia.

La ceremonia se realizó dos semanas después de la visita de Francisco, la primera de un Pontífice, a la iglesia anglicana de All Saints, en la que el Santo Padre señaló que el ecumenismo se realiza caminando juntos.

ZENIT conversó con Mons. Artur Roche, subsecretario de la Congregación del Culto Divino, quien precisó que el evento sucede en el aniversario de los 1420 años de la elección del monje Agustín como evangelizador de Inglaterra. Agustín de Canterbury, venerado como santo por los católicos y anglicanos, quien fue enviado junto al rey Bretwalda , Ethelber del Kent, por el papa san Gregorio I, en el 597.

“Estas vísperas se registran pocos días después de la visita del papa Francisco a la Iglesia anglicana All Saints”, dijo el obispo inglés y precisó que “en esta ocasión el Santo Padre ha dicho que la palabra humildad no es solamente una linda virtud sino que distingue a nuestra identidad cristiana, y yo he pensado que esta humildad se tiene que traducir en un servicio mutuo en este momento del camino ecumenico, con generosidad de corazón y una gran fe. Porque Cristo rezó por la unidad”.

Mons. Roche señaló que el Papa en el día de Pentecostés dijo que “los cristianos tienen que salir del refectorio, en misión, para anunciar el Evangelio, sin volver al refectorio para sentir un clima de seguridad, contrariamente se quedan en un refectorio que es un poco oscuro y no tiene la luz fruto de la alegría de predicar el Evangelio”.

“El Papa recuerda a los anglicanos y también a los católicos -señala el número dos del Congregación del Culto Divino- que no debemos anunciarnos a nosotros mismos, sino a Jesucristo”. Precisa así que “el triunfalismo es algo del pasado, no es un puente sino un puesto de bloque. No favorece el caminar juntos, con fe, aunque procedamos de la misma fuente”.

Sobre la diferencia existente en la oración entre las vísperas católicas y anglicanas, Mons. Roche indica que “hay elementos comunes como el canto de los salmos y el Magníficat” si bien “la forma y organización de estos textos es un poco diversa”.

El prelado quiso así subrayar que “sobre todo tenemos que rezar juntos, porque la unidad es un don de Dios, no es un proceso humano. Y esperamos en este momento esta gracia de Dios” y que en estas vísperas “se ha rezado juntos para obtener de Dios el don de la unidad, como un signo de la fraternidad entre los cristianos”.

Interrogado sobre los sacerdotes anglicanos que regresaron al catolicismo, Mons. Roche indicó que “el papa Benedicto creó un ordinariato para los sacerdotes anglicanos que retornaron”. Pero que no hay que olvidarse de los otros, porque “los obstáculos y desafíos en este momento son muchos, como la ordenación de las mujeres y el tema de la homosexualidad”. Así “estas dificultades demuestran que la unidad será un don de Dios”.

Indicó entretanto que es necesario “estar más cerca, porque cuando una persona está lejos de otro grupo humano hay también una distancia en la evaluación de los temas. En cambio cuando estamos más cerca de los otros es posible que vean nuestra fe en Cristo y nuestra fe eclesial, y que la otra persona sepa la verdad, sobre los temas más centrales. Pero tenemos que caminar para ello, tenemos que comunicar con los otros”.

Estas vísperas en el Vaticano no es el primer acto de este tipo que se realiza en conjunto, dijo: el Coro de la Capilla Pontificia Sixtina ya cantó con el de Westminster, incluso el Tu es Petrus en la basílica de San Pedro, “donde nuestra fe es muy evidente porque está edificada sobre la tumba de Pedro de quien es sucesora”.

Y recordó que “muchos años atrás, 30 o 40, era mal visto que un anglicano hiciera una peregrinación a Roma, y también para un católico ir a una peregrinación a Canterbury. Ahora es menos difícil, y esta cercanía en el orden de la caridad y hermandad, es algo que debemos hacer, porque es obedecer a la recomendación del Señor”. Al concluir recordó que “un cardenal hace años atrás dijo que el ecumenismo es un camino del cual no es posible salirse”. Por eso “tenemos que caminar juntos hacia adelante, esperando este don de Dios de que será la unidad”.

¿Por qué The Economist lo pregunta si antes ya lo hizo otra revista?: “¿Es el papa Católico?”


¿Falta de creatividad e inventiva, ligereza, una mera coincidencia? La portada de la edición de The Economist que ha salido hoy a circulación trae un llamado a uno de sus artículos con el siguiente titular (recuadro amarillo en la imágen inferior): “¿Es el papa Católico?”.



Y la curiosidad nos viene porque ya hace dos años Newsweek también preguntó en primera página lo mismo.



¿Cuál es la intención del repetido titular en The Economist?

El artículo completo de The Economist aquí (inglés).

Dubia sobre Amoris Lætitia: Corrección formal sigue en pie

Continuando con el seguimiento de la información de ayer, en realidad rumor, que hablaba de que los 4 cardenales que presentaron las Dubia (dudas) a Francisco pidiendo claridad sobre ciertos aspectos confusos de Amoris Lætitia, Edward Pentin en su cuenta de Twitter ha publicado dos trinos.

En el primero de ellos afirma que “según fuentes informadas” la corrección de un error formal anunciada en primer momento por el card. Burke en caso de no recibir respuesta, “continúa en programa”.




En un segundo momento se reafirma diciendo que “los rumores que ruedan de que la corrección ha sido archivada, son falsos”.




Como evidentemente la poca información al respecto es contradictoria, es de suponerse que en el futuro haya desarrollos.

Francisco dice que exorcistas han de “elegirse con sumo cuidado y mucha prudencia”...¿los eligen acaso los obispos?


Una inusual reivindicación por parte de un Papa —el actual u otro de tiempos recientes— sobre el papel, la existencia y la escogencia de los exorcistas, ha hecho hoy Francisco en su discurso a los participantes en el curso sobre el Fuero interno organizado por la Penitenciaría Apostólica.

Inusual también es que la sección en español del boletín diario de la Oficina de Prensa de la Santa Sede haya provisto inmediatamente una traducción al español del discurso.

La parte pertinente:

El discernimiento también es necesario porque, quien se acerca al confesionario, puede venir de las situaciones más disparatadas; podría tener también trastornos espirituales cuya naturaleza debe ser sometida a un cuidadoso discernimiento, teniendo en cuenta todas las circunstancias existenciales, eclesiales, naturales y sobrenaturales. Cuando el confesor se dé cuenta de la presencia de verdaderos trastornos espirituales - que también pueden ser en gran parte psicológicos, y esto debe apurarse mediante una sana colaboración con las ciencias humanas -, no dudará en referirse a aquellos que, en la diócesis están encargados de este delicado y necesario ministerio, a saber los exorcistas. Pero éstos tienen que elegirse con sumo cuidado y mucha prudencia.

Para nosotros constituye un llamado, así sea tácito, para que los Sres. Ordinarios abandonen esa inveterada práctica de no nombrar “exorcistas” es su jurisdicciones ó, peor aún, nombrar al primer imbécil que se les ocurra con el fin de salir a enrostrarlo para simular que sí han nombrado a alguien, llenando de iure la casilla de “exorcista”, pero sin ejercer de facto el oficio. Es decir, indefectiblemente siempre que se presente la oportunidad esos dizque “exorcistas” remiten las almas a los psiquiatras.