Sunday, February 05, 2017

Card. Sistach: Amoris Lætitia no es ambigua


¿En cuántos días va a ser reimpresa en L'Osservatore Romano esta entrevista de Vanguardia con el Card. Lluís Martínez Sistach, arzobispo emérito de Barcelona? Lo preguntamos porque L'Osservatore Romano es una de las trincheras mediaticas para defender la interpretación rupturista de Amoris Lætitia y las afirmaciones del card. Sistach vienen muy bien para el propósito.

Esta es la parte medular de la entrevista.

¿Es necesario explicar cómo aplicar el Amoris Laetitia?

La Amoris Laetitia es muy clara. En la moral tradicional ya está el principio de circunstancias eximentes y atenuantes. Cuando en una situación concreta se dan estas circunstancias, un acto que objetivamente reviste gravedad moralmente, puede ser que subjetivamente no lo sea. Y sobre todo, como dice Francisco, la Iglesia tiene que ayudar a estas personas, integrarlas en la comunidad, incluso con la posibilidad de comulgar. El Papa no habla de categorías, de los divorciados; habla de personas concretas. No es “se puede” o no “se puede” comulgar. Es depende de la persona, de las situaciones, de los eximentes y de los atenuantes, de su discernimiento en conciencia ante Dios. Es un proceso dinámico y abierto que se tiene que hacer con la ayuda de un sacerdote.

Cuatro conocidos cardenales han denunciado públicamente con una carta que esta exhortación crea dudas y que el Papa tendría que aclararlas.

Esta carta me ha dolido mucho. He quedado muy impresionado negativamente. Los cardenales tenemos que ayudar al Papa, no ponerle dificultades. Se puede hablar con el Papa o escribirle una carta, pero no publicarla. El contenido no ha sido bien recibido y el método tampoco.

La Amoris Laetitia ¿no es ambigua?

No. Las circunstancias atenuantes y eximentes son un principio recogido en el Catecismo. Es la doctrina tradicional. Juan Pablo II ya decía que se tiene que examinar caso por caso. No hay un cambio doctrinal. Y lo que dice Francisco es que con la lógica del Evangelio no se puede condenar a nadie para siempre. ¿Se habla de dudas, dudas..., qué dudas? ¿Se puede o no se puede aplicar este principio en el caso concreto de los divorciados? Sí. Pues este es el gran argumento.

Y este el video de la entrevista (catalán).