El P. Antonio Spadaro, entrevistado hoy por Radio Vaticano en italiano es preguntado sobre la controversia suscitada por Amoris Lætitia (en este punto hay que hacer una aclaración pertinente, la cual no vamos a repetir dado que la hicimos ayer cuando tradujimos unas otras respuestas del mimso personaje a otro medio; los remitimos a ella). Traducción de Secretum Meum Mihi.
P. - Amoris Laetitia es el documento papal publicado este año que despertó más interés, pero también críticas en el ámbito católico. Este pontificado vive también en sí esta dimensión de tensión. ¿Cuáles son las indicaciones que Francisco ofrece para afrontar esta situación?
R. - Varias veces Francisco ha dicho que el conflicto es parte de la vida, así que es absolutamente importante en los procesos eclesiales. El Papa más bien está preocupado cuando no se mueve nada, cuando no hay tensiones, a veces cuando no hay oposiciones. Entonces, si el proceso es real, crea tensión efectiva. Amoris Laetitia es un documento extraordinario porque en el fondo pone la historia no sólo del pueblo de Dios, sino del creyente individual al centro de la relación entre el hombre y Dios. Y entonces pone el discernimiento como criterio fundamental y siente, advierte, cómo la familia es el núcleo central para la sociedad de hoy. Entonces toca muchos temas: el tema de la familia como el núcleo central, pero también las situaciones de fractura, de crisis, las afronta sabiendo que el Señor habla a cada persona considerando su historia de fe. Así que también aquí, en este caso, no se dan normas y reglas generales absolutas, abstractas y válidas en todas las situaciones, sino que esta exhortación apostólica es la invitación a cada pastor para acercarse al fiel, a acercarse a la historia de cada persona individual.