Thursday, October 06, 2016

Obispo de Amberes quiere un ritual para bendecir la sodomía y el amancebamiento

¿Les parece muy tendencioso el titular?, ¡pues léan! Información de Gazet van Antwerpen, Oct-06-2016, pág. 8. Traducción de Secretum Meum Mihi.

En un subrayable pasaje en el libro Dank je. Sorry. Vrijmoedige dialoog over relaties, huwelijk en gezin [“¿Puedo? Gracias. Lo siento. Un diálogo franco sobre las relaciones, el matrimonio y la familia”], que aparecerá el 11 de octubre publicado por Lannoo, el obispo de Amberes [Antwerpen] piensa en voz alta sobre los nuevos rituales religiosos. [Johan] Bonny escribió el libro junto con Roger Burggraeve e Ilse Van Halst. “La pregunta es si deberíamos incluir todo en un solo modelo” dice Bonny. “No deberíamos evolucionar en una diversidad de rituales en los cuales podamos reconocer desde la perspectiva eclesiástica y religiosa, las relaciones entre homosexuales.” Las parejas homosexuales pueden también buscar una relación exclusiva y duradera. Sin embargo, el profundo vínculo simbólico entre las diferencias de género y la fertilidad de su relación se convierte en una verdadera unión sacramental.

La actitud hacia los divorciados en una nueva relación requiere una aproximación diferente. Bonny cree que la Iglesia en algunos casos podría bendecir una segunda relación, “Se sabe que tradicionalmente la Iglesia Ortodoxa practica la confirmación de una nueva relación por razones de misericordia, que te permite como nueva pareja, redescubrir un lugar en la comunidad. Sin embargo, esta nueva bendición no es una repetición o reemplazo del primer matrimonio sacramental. Que fue y permanece como el único.”

La verdadera doctrina

A quien tiene una fe clara, según el Credo de la Iglesia, a menudo se le aplica la etiqueta de fundamentalismo. Mientras que el relativismo, es decir, dejarse «llevar a la deriva por cualquier viento de doctrina», parece ser la única actitud adecuada en los tiempos actuales. Se va constituyendo una dictadura del relativismo que no reconoce nada como definitivo y que deja como última medida sólo el propio yo y sus antojos.

Card. Joseph Ratzinger
Homilía en la Misa Pro Eligendo Pontifice
Basílica de San Pedro
Ciudad del Vaticano
Abr-18-2005


Información de Radio Vaticano, Oct-06-2016.

(RV).- La verdadera doctrina no es el rígido apego a la Ley que encanta como las ideologías, sino que es la revelación de Dios que se deja encontrar cada día más por cuantos están abiertos al Espíritu Santo. Lo afirmó el Papa en su homilía de la Misa matutina celebrada en la Capilla de la Casa de Santa Marta.

El Santo Padre destacó los aspectos que surgen de las lecturas del día, que se refieren al Espíritu Santo, ese “gran don del Padre” – dijo – , que es la fuerza que hace salir a la Iglesia con coraje para que llegue hasta el fin del mundo. Es el Espíritu “el protagonista de este ir adelante de la Iglesia”. Mientras sin él – añadió Francisco– se produce la cerrazón y el miedo. E indicó las tres actitudes que podemos tener con el Espíritu. La primera de las cuales es la que San Pablo reprocha a los Gálatas, a saber: el hecho de creerse justificados por la Ley y no por Jesús “que da sentido a la Ley”. Y de este modo, eran “demasiado rígidos”. Son los mismos que atacaban al Señor que los llamaba “hipócritas”:

“Y este apego a la Ley hace que se ignore al Espíritu Santo. No deja que la fuerza de la redención de Cristo salga adelante con el Espíritu Santo. Ignora; sólo la Ley. Es verdad que están los Mandamientos y nosotros debemos seguirlos; pero siempre desde la gracia de este don grande que nos ha dado el Padre, su Hijo, es el don del Espíritu Santo. Y así se comprende la Ley. Pero no reducir al Espíritu y al Hijo a la Ley. Éste era el problema de aquella gente: ignoraba al Espíritu Santo y no sabían ir adelante. Estaban cerrados, encerrados en las prescripciones: se debe hacer esto, se debe hacer aquello otro. A veces, a nosotros, nos puede suceder que caigamos en esta tentación”.

Los Doctores de la Ley – afirmó el Papa Bergoglio – “encantan con las ideas”:

“¿Por qué las ideologías encantan; y así Pablo comienza, aquí: ‘Necios Gálatas, quién los ha encantado?’. Aquellos que predican con ideologías: ¡es todo justo! Encantan: ¡todo claro! Pero mira la revelación de Dios, ¿acaso no es clara? A la revelación de Dios se la encuentra cada día más, más, más; siempre en camino. ¿Es clara? ¡Sí! ¡Clarísima! Es Él, pero nosotros debemos encontrarla en camino. Y aquellos que creen que tienen toda la verdad en la mano no son ignorantes, Pablo dice más: ‘¡Necios!’. Que se han dejado encantar”.

La segunda actitud es entristecer al Espíritu Santo, lo que sucede – prosiguió diciendo el Pontífice – “cuando no dejamos que Él nos inspire, que nos lleve adelante en la vida cristiana”, cuando “no permitimos que Él nos diga – no con la teología de la Ley, sino con la libertad del Espíritu – lo que debemos hacer”. De este modo, recordó el Papa, nos volvemos “tibios” y caemos en la “mediocridad cristiana”.

La tercera actitud, en cambio, es precisamente “abrirse al Espíritu Santo y dejar que Él nos conduzca. Como hicieron los Apóstoles con el coraje que tuvieron el día de Pentecostés. Perdieron el miedo y se abrieron al Espíritu Santo”. “Para entender, para acoger las palabras de Jesús – dijo también Francisco – es necesario abrirse a la fuerza del Espíritu Santo. Y cuando un hombre, una mujer, se abre al Espíritu Santo es como un velero que se deja arrastrar por el viento y va adelante, adelante, adelante y no se detiene más”. Pero es necesario “rezar para abrirse al Espíritu Santo”:

“Nosotros podemos preguntarnos hoy, en un momento de la jornada, ¿yo ignoro al Espíritu Santo? ¿Y sé que si voy a Misa el domingo, si hago esto, si hago esto es suficiente? Segundo: ¿mi vida es una vida a medias, tibia, que entristece al Espíritu Santo y no deja en mí la fuerza de ir adelante, de abrirme? ¿O, finalmente, mi vida es una oración continua para abrirse al Espíritu Santo, para que Él me lleve adelante con la alegría del Evangelio y me haga entender la doctrina de Jesús, la verdadera doctrina, aquella que no encanta, aquella que no nos hace necios, sino la verdadera? Y que nos haga entender dónde está nuestra debilidad, aquella que lo entristece a Él; y que nos lleve adelante, llevando adelante también el nombre de Jesús a los demás y enseñando el camino de la salvación. Que el Señor nos dé esta gracia: abrirnos al Espíritu Santo para no volvernos necios, encantados, ni hombres y mujeres que entristecen al Espíritu”.

Tema del próximo Sínodo de 2018: Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional

Información del boletín de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Oct-06-2016.

Sínodo 2018: Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional

El Santo Padre, después de haber consultado, como de costumbre las conferencias episcopales, las Iglesias orientales católicas sui iuris y la Unión de los Superiores Generales, además de haber escuchado las sugerencias de los Padres de la pasada asamblea sinodal y el parecer del XIV Consejo ordinario, ha establecido que en octubre de 2018 se celebrará la XV Asamblea general ordinaria del Sínodo de los Obispos cuyo tema será : “Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional”.

El tema, expresión de la solicitud pastoral de la Iglesia por los jóvenes está en continuidad con los resultados de las recientes asambleas sinodales sobre la familia y con el contenido de la exhortación apostólica post-sinodal Amoris Laetitia. Su propósito es acompañar a los jóvenes en su camino existencial hacia la madurez para que, mediante un proceso de discernimiento, descubran su proyecto de vida y lo realicen con alegría abriéndose al encuentro con Dios y con los seres humanos y participando activamente en la edificación de la Iglesia y de la sociedad.