Friday, August 12, 2016

Card. Angelo Bagnasco: “Se quiere crear un orden mundial sin Dios”

Hoy en día —en nombre de valores como la igualdad, la tolerancia, los derechos...— se pretende marginar el cristianismo, y se quiere crear un orden mundial sin Dios, donde la diversidad de una parte es exaltada y de la otra es aplastada. Esto vale para los ciudadanos del continente europeo y vale para los pueblos y las Naciones. Pero si nos fijamos en los resultados, debemos concluir que se ha partido con buenas intenciones pero malas decisiones. La voluntad prepotente de homologar, de querer condicionar las profundas visiones de la vida y de los comportamientos, el sistemático reajuste de las identidades culturales, se asemejan no a un camino respetuoso hacia una Unión Europea armónica y unida, ciertamente necesaria, sino sobre todo a una perjudicial refundación continental que la gente siente pesada y arrogante, donde el cristianismo es considerado divisivo, porque no se postra hacia los emperadores de turno. La historia atestigua que cuando los poderosos se concentran en la propia sobrevivencia por ambiciones personales, y renunciar a la cosa pública, es la hora de la decadencia. Marginar el cristianismo de la esfera pública es un signo no de inteligencia, sino de miedo; es no comprender, ofuscado por los prejuicios, que la sociedad podría no tener el bien: sí, puede tener el bien, no porque se pueda servir en modo instrumental, sino porque la luz del Evangelio, no las mayorías no confiables, ha creado la civilización europea y su humanismo. Cuanto más se estudian seriamente los orígenes del humanismo y más se reconoce la existencia de algo que no es solamente espiritual, sino que es netamente cristiano.

Card. Angelo Bagnasco
Homilía en la Fiesta de San Lorenzo
Catedral de Génova, Italia
Ago-10-2016
[traducción propia]