Artículo de Time, Nov-11-2015. Traducción de Secretum Meum Mihi.
Exclusivo: El Vaticano se encuentra con el Enviado del Departamento de Estado de EE.UU. para los Gays y las Lesbianas
Elizabeth Dias
Una reunión simbólica para abrir un diálogo controversial
El encuentro tuvo lugar en un salón no determinado en el Vaticano, y la conversación se apegó a informes diplomáticos regulares. Pero para las partes involucradas en la mañana del Martes, la reunión tuvo importancia histórica: Randy Berry, el por primera vez Enviado especial para los Derechos Humanos de las personas LGBTI, y oficiales vaticanos de la oficina de la Secretaria de Estado de la Santa Sede se reunían por primera vez.
El momento, simple como fue, marcó un nuevo nivel del compromiso de Estados Unidos con la Iglesia Católica sobre temas de derechos humanos LGBT. Berry dijo a TIME que se reunió con oficiales durante aproximadamente una hora, y se reunió por separado con representantes del Consejo Pontificio Justicia y Paz. Para ambas partes, las conversaciones eran nuevas.
El presidente Barack Obama sólo creó en Abril la posición de Berry en el Departamento de Estado, y hasta ahora, Berry ha principalmente sólo hablado con líderes religiosos en el campo, ya que ha viajado a 30 países en los últimos siete meses. Se reunió con congregaciones evangélicas en Jamaica cuando visitó en mayo, por ejemplo. Las conversaciones sobre los derechos humanos LGBT nunca antes habían alcanzado este nivel con la Iglesia Católica, que considera la conducta sexual de los gays y las lesbianas un pecado y restringe el matrimonio a las uniones de un hombre y una mujer.
El enfoque de Berry no es sin embargo sobre el matrimonio, sino en las cuestiones gemelas de política exterior de violencia y discriminación. Esa estrategia, Berry espera, permite un terreno común con el Vaticano para enfrentarse juntos en contra de la violencia extrema. “No estábamos allí para hablar de temas de uniones civiles o el matrimonio del mismo sexo, por ejemplo, porque eso no es parte de nuestra política”, dice Berry. “Eso no es parte de la conversación en la que estuviéramos interesados en participar, ni creo que ellos tampoco”.
Berry pidió la reunión del Vaticano como parte de su viaje de tres semanas por Europa del Este, que ha incluido visitas a cinco países y una parada en Atenas para la Conferencia Anual de ILGA, una asociación Internacional de derechos de lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales. Los oficiales de la Iglesia aceptaron. “Quería una oportunidad para informar a los funcionarios del Vaticano por mí mismo”, dice Berry. “Estos problemas de violencia y discriminación extrema son motivo de preocupación para todos nosotros”.
La reunión es particularmente destacable antes de la visita de Francisco a Uganda a finales de mes, donde la homosexualidad es ilegal. Cuando Uganda introdujo una ley el año pasado que criminalizó más la homosexualidad con penas de prisión extensas, las potencias occidentales, incluyendo los EE.UU. presionaron, mientras que los líderes católicos locales tuvieron respuestas mixtas. Finalmente Tribunales tumbaron la medida, pero cientos gays ugandeses han huido a Kenia desde entonces, donde la homosexualidad también es ilegal y donde el Papa Francisco también planea una visita durante su viaje a Centroáfrica.
Berry dice que pasó el tiempo en “modo de escucha” para aprender de los oficiales acerca de cómo el Papa Francisco se involucra en cuestiones de derechos humanos cuando él viaja. Él recuerda cómo se incluyó un activista de los derechos de los homosexuales cuando un numeroso grupo de activistas políticos se reunió con el Papa Francisco en Paraguay este verano. “Ese enfoque habla mucho”, dice Berry. “Esperaría que ciertamente esos mismos mensajes son compartidos, y totalmente espero que lo sean, porque creo que son completamente consistentes con lo que hemos visto de Su Santidad en el pasado”.
El solo hecho de que la reunión pasara es revelador. Es una señal de que el gobierno de Obama ve oportunidad futura para trabajar con el Vaticano después de la visita de septiembre del Papa, con la posibilidad de construir sobre la asociación que han fortalecido en el cambio climático y la migración. También es una señal de que los esfuerzos diplomáticos del Vaticano están dispuestos a asumir cierto grado de riesgo al hablar con EE.UU. sobre este tema, ya que las cuestiones LGBT pone a la Iglesia en un centro de atención a menudo conflictivo. El Papa Francisco ha seguido abogando por el diálogo y la escucha a una gama de perspectivas así como él ha incrementado el activismo diplomático de la Santa Sede, y el Departamento de Estado de Estados Unidos continúa tomando nota y buscando oportunidades de participar.
Sin embargo, la discusión de cualquier colaboración concreta con el Vaticano sería prematura. Por ahora, Berry espera más puntos en común y ampliar contactos para futuras conversaciones. “Fue un importante primer diálogo y espero que continuemos”, dice Berry. “Tengo que hacer un montón de cosas realmente increíbles en este trabajo”, continúa. “Fue una experiencia muy positiva”.