Sunday, July 19, 2015

¡Olvídese de los retiros en silencio de 40 días!, la moda es el ‘Hermana Spa’

Artículo de agencia ADN Kronos, Jul-18-2015. Traducción de Secretum Meum Mihi.

‘Hermana Spa’, es el boom de las vacaciones entre oraciones y masajes. Desde la orden de las Ursulinas de Ortigia, en Siracusa, a la comunidad de Camaldoli, religiosos y religiosas están cada vez más equipados para acomodar mejor al turismo espiritual que no conoce límites.

En Ortigia, por ejemplo, las Ursulinas han dado vida a un verdadero y propio spa donde se podrá reposar y, al mismo tiempo, dedicarse a la búsqueda de la paz interior.

En el centro es posible seguir tratamientos estéticos, curativos, con rutas específicas. Las hermanas también están poniendo a disposición la ‘ducha emocional’ con aromaterapia y cromoterapia. A disposición de los huéspedes también una sugestiva cueva de vapor para meditar en silencio. Las Ursulinas han predispuesto también una vía Kneipp, piscina, hidromasaje y centro estético. En la Domus Mariae también hay una zona fitness.

La comunidad monástica benedictina de Camaldoli está abierta a todos, “creyentes y no creyentes deseosos de confrontarse en el respeto de los caminos personales”, explican los monjes que acogen indistintamente a laicos y religiosos, solteros y familias. Una gran afluencia también en Bose en la comunidad del Padre Enzo Bianchi. Se recomienda llevar siempre la Biblia y las sábanas (o saco de dormir).

La ofrenda es libre “de acuerdo a las posibilidades”. El horario para los huéspedes en los días de trabajo es puntualmente así: 5:00 AM campana despertadora; 05:30 hora para el desayuno. A las 12.30 oración del mediodía. A las 13 y a las 19 almuerzo y la cena. A las 20, hora del ‘Gran Silencio’. En el monasterio de Enzo Bianchi puede entrar cualquiera, “nadie —explica la comunidad— debe ser excluidode este lugar por razones económicas”.

En Subiaco, los monjes benedictinos de Santa Escolástica está listos para dar la bienvenida a solteros, grupos mixtos, familias, peregrinos. A disposición de los huespedes, cincuenta habitaciones y un restaurante de cincuenta sillas. En Farfa, depués, la comunidad benedictina (con 14 habitaciones), para satisfacer también a grupos numerosos, ha pensado en trabajar en sinergia hombro a hombro con las Brigidinas.

Anunciando que “hay otros dos edificios en construcción que permitirá el alojamiento de los grupos más grandes e incluso familias”, los monjes de Farfa remiten los grupos grandes a la comunidad de las Hermanas de la Orden del Santísimo Salvador de Santa Brígida: “las Brigidinas en un espíritu de caridad y servicio, gestionan una casa de acogida anexa a la abadía”.

Homosexual declarado al que se le niega la Comunión se queja y recibe excusa de la diócesis bajo la jurisprudencia ‘quién soy yo para juzgar’

Tim Ardillo, homosexual declarado, casado con un hombre, estaba en el funeral de su madre en la iglesia de Santa Helana en Amite, diócesis de Baton Rouge, Louisiana, Estados Unidos, y se acercó a recibir la Sagrada Comunión, la cual le fue negada por el párroco, P. Mark Beard, según Ardillo porque estaba casado fuera de la Iglesia, o eso fue lo que le entendió al párroco. Ardillo cree que el P. Beard supo de su situación al leer el obituario de su madre, en donde especificaba que estaba casado con un hombre.

The Advocate, señala que:

Ardillo dice que desde entonces recibió una disculpa de la Diócesis de Baton Rouge, la cual directamente supervisa la iglesia de Amite, y una disculpa personal del Arzobispo de New Orleans, Gregory Aymond, aunque la oficina de Aymond declinó comentar sobre el asunto para esta historia.

Más adelante se lee en el mismo artículo.

La portavoz de la Diócesis [de Baton Rouge], ministro eucarística [sic], dijo que la diócesis no condona la negación de la comunión a los católicos sólo porque son gays.

“Es muy sorprendente que se le haya negado la comunión. Eso simplemente no sucede...No negamos la comunión”, dijo. “¿Quiénes somos nosotros para juzgar si ellos creen (en las enseñanzas de la Iglesia sobre la comunión) o no? Eso es entre Usted y Dios”.

Después del incidente Ardillo salió de la iglesia con su esposo, pero una pariente lesbiana lo convenció de que volviera. Ardilllo, que ahora vive en Indiana, fue monaguillo en la misma iglesia cuando niño.