Extractado de un artículo basado en una entrevista con el Card. Camillo Ruini, aparecido en Il Foglio, Jun-12-2015. Traducción de Secretum Meum Mihi.
En primer lugar, una premisa obligada que lleva a Medjugorje. El Papa, de regreso de su viaje a Sarajevo, fue claro: en no mucho tiempo llegará el veredicto sobre las apariciones marianas. En Corriere della Sera se ha leído de una propuesta firmada por Ruini llevada a la atención del Papa: “Sólo esto —observa el purpurado— me ha desagradado: el título de la noticia, ‘Ruini: mi propuesta sobre Medjugorje’. La propuesta, o más bien, la relación —o como dice el Papa, el estudio— es una propuesta de la comisión, no la mia personal. Y la comisión ha consignado a la Congregación para la Doctrina de la Fe, terminado así su tarea. Pocos días después, yo he llevado la misma relación al Pontífice a nombre de la comisión. En realidad, hicimos por todos los cuatro años, un trabajo fuertemente colegial. Y sería muy mezquino de mi parte —así como infundado— tratar de apropiármelo”.
De todos modos, hay indiscreciones que circulan desde hace tiempo en la red: se habla de un juicio negativo, pero que no puede no tener en cuenta los frutos visibles que el árbol de Medjugorje ha dado. “Son indiscreciones gratuitas”, observa el cardenal. “La comisión terminó sus labores en enero del año pasado, hace mucho tiempo. La plenaria de la Congregación para la Doctrina de la Fe, que aún no se ha reunido, hará su valoración, que creo será presentada al Santo Padre. Las noticias que salen ahora son por tanto suposiciones. Ninguno de nosotros de la comisión puede decir nada, porque todo está sub secreto pontificio. El Papa dijo que por ahora sólo se da orientaciones a los obispos, pero en el contexto de las líneas que se tendrán. ¿Cuáles serán, ya veremos”.
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