Friday, June 06, 2014

Sor Cristina ganó concurso de talento en Italia


La reseñamos al comienzo de su incursión en la versión italiana del programa de talento “The Voice”, ahora el consurso finalizó y Sor Cristina se coronó como ganadora.

Este es un despacho de agencia AFP, Jun-05-2014.

Milán— Sor Cristina, una monja de 25 años que había dejado boquiabierto a medio mundo, ganó ayer la final del concurso ‘La Voz de Italia’, gracias a una voz portentosa y a sus numerosos seguidores en Internet.

Sin mostrarse alterada por su victoria con el 62 por ciento de los votos ante el joven rockero Giacomo Voli, llamó a todos los asistentes a rezar el Padre Nuestro “para agradecer” a Dios.

“Quiero que Jesucristo entre aquí, es un sueño”, tras recibir el trofeo de ‘The Voice of Italy’, que representa tres dedos de una mano sosteniendo un micrófono. También agradeció calurosamente a su ‘coach’ en el programa organizado por la RAI Due, el rapero J-AX, por haberla “protegido” frecuentemente ante quienes la criticaban.

Por su parte, el cantante, quien se había descrito como ‘el diablo ante el agua bendita’, consideró increíble el desempeño de Sor Cristina, que se presentó entre cuatro finalistas rigurosamente ataviada con un vestido y velo negro. Él la animó a “cambiar las cosas, a brindar un ejemplo importante”.

“Tengo un don y se los entrego”, había lanzado Cristina Sciuccia, de 25 años de edad, cuando los cuatros jueces del programa, tras elegirla por unanimidad el pasado 19 de marzo en una audición a ciegas, le preguntaron lo que hacía. La presencia de una monja destacó particularmente en este concurso reservado generalmente a los aficionados a la brillantina.

La famosa cantante y presentadora Raffaella Carra, sorprendida por la vestimenta de Sor Cristina, en hábito y velo gris de monja, incluso le preguntó si era una verdadera religiosa y lo que pensaba del Papa Francisco, del que la joven siciliana dice inspirarse.

“Todo esto ocurrió porque, fuera, hay una sed de alegría, de amor, una sed de un mensaje bello y puro”, había explicado la hermana Cristina en su primera conferencia de prensa, el miércoles, víspera de la gran final.

Batiendo récords

Desde su selección por parte del rapero J-AX -para jugar con el contraste entre “él, el diablo y ella el agua bendita”- el entusiasmo del público por la joven Cristina que tomó los hábitos en 2012 no fue desmentido. Ha permitido a la RAI Due (segundo canal público italiano) batir sus propios récords de audiencia, sistemáticamente por encima del 15 por ciento.

No todos la quieren

La joven religiosa cuenta también con sus detractores.

La última candidata italiana al concurso de Eurovisión, Emma Marrone, ella misma descubierta por un programa de televisión, la calificó como “un insulto para el mundo del espectáculo”.

Algunos críticos musicales estiman que su éxito se debe más al símbolo que representa en un país todavía impregnado por el catolicismo y al efecto mediático que a su voz, que consideran relativamente limitada.

Viene lo más difícil

La fecha decisiva para la vida de Sor Cristina Scuccia no fue ayer en Milán, donde se realizó la final del concurso ‘La Voz de Italia’, sino el 29 julio en la ciudad de Asís, día en el que deberá renovar los votos de castidad, pobreza y obediencia para así convertirse, de manera definitiva, en una verdadera Orsolina, nombre que adoptaron, como sinónimo de “enseñantes”, diversas religiosas provenientes de institutos seculares.

Ante este dilema, toda Italia se pregunta si Sor Cristina confirmará serenamente, independientemente del resultado de esta final, sus votos y su fe religiosa o si, por el contrario, meditará y eventualmente decidirá continuar con su prometedor futuro de ‘popstar’ con hábito religioso.

Lo anterior se debe al hecho de que desde hace unas semanas corre el rumor que la casa discográfica que tiene los derechos de los cantantes que participan en ‘La Voz’ ha propuesto, a la casi religiosa, un ‘tour’ mundial, pero también corre el rumor que podría no interesarse más en ella si decide renunciar a su vocación.

Esto último es por demás lógico. Renunciando a su vocación Sor Cristina ya no sería el gran negocio que esta empresa tiene en mente además de que, según la misma empresa, terminaría olvidada por el gran público tal como ha sucedido con tantos otros cantantes emergentes en este y otros programas televisivos.

Algunos de sus fieles seguidores aconsejan a Cristina Scuccia seguir siendo monja para de esta manera poder continuar con su carrera de vedette planetaria.

Pero nadie puede negar que Sor Cristina se haya convertido en un fenómeno mediatico al cual se ve difícil que pueda o quiera renunciar, sobre todo cuando el mundo entero habla de ella, la comparan con Alicia Keys y Whoopy Goldberg, e incluso han encontrado a Lucio, su novio antes de entrar al mundo religioso, quien prudentemente dice no recordar el primer beso que se dieron.