Thursday, February 27, 2014

El Papa celebrará la Misa in Cena Domini el Jueves Santo...como hizo el año pasado

El boletín diario de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Feb-27-2014, publica el calendario de las celebraciones litúrgicas presididas por Francisco para Marzo y Abril de 2014; al final del mismo aparece la siguiente nota, cuya traducción tomamos de la proporcionada por V.I.S.:

El Papa celebrará la Misa in Cena Domini el Jueves Santo por la tarde, pero como hacía ya en Buenos Aires y como hizo el año pasado, elegirá una situación particular desde el punto de vista pastoral que se comunicará en el momento oportuno. No se tratará, por lo tanto, de la celebración en una basílica ni habrá posibilidad para la participación de un amplio número de personas y la Prefectura de la Casa Pontificia no distribuirá entradas para dicha ceremonia.

[* Il Papa celebrerà la Messa in Cœna Domini nel pomeriggio del Giovedì Santo ma, come faceva già a Buenos Aires e come ha fatto l’anno scorso, sceglierà una situazione particolare dal punto di vista pastorale, che verrà comunicata a tempo opportuno. Non vi sarà quindi la celebrazione in una Basilica né la possibilità di partecipazione da parte di un ampio numero di fedeli e la Prefettura della Casa Pontificia non distribuirà biglietti per tale celebrazione.]

¿“Como hizo el año pasado”?

Müller y la Teología de la Liberación “normalizada”


Artículo de Vatican Insider, Feb-27-2014.

27/02/2014
Müller y la Teología de la Liberación “normalizada”

El más reciente libro del prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, que incluye el prólogo del Papa Francisco y textos del “padre” de la Teología de la Liberación, Gustavo Gutiérrez

ANDRÉS BELTRAMO ÁLVAREZ
VATICAN INSIDER


“Pobre y para los pobres”. La palabras del Papa son también el título del más reciente libro de Gerhard Ludwig Müller, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe. Un texto que parece ser el paso definitivo hacia una Teología de la Liberación “normalizada”. El volumen, que cuenta con el prólogo de Francisco, se presentó en un auditorio del Vaticano, a unos pasos de la Plaza de San Pedro, y con un relator sorpresa: Gustavo Gutiérrez.

Müller es el principal artífice de esta “normalización” a una corriente de pensamiento que todavía desata encendidos debates en América Latina. Él es, desde hace décadas, amigo personal de Gutiérrez, “padre” de esa teología. Tras la presentación del libro el flamante cardenal alemán explicó a los periodistas por qué la apoya sin dudar.

¿Por qué generó polémica en su momento la Teología de la Liberación?

Cuando se está desarrollando una teología existen circunstancias del contexto y se presentan preguntas que deben aclararse. La Teología de la Liberación comenzó con la “Gaudium et Spes”, que contiene una nueva definición de las relaciones entre la Iglesia y el mundo. La Teología de la Liberación era una gran aplicación de este documento de la Iglesia a la situación de América Latina.

¿Entonces cuál era el problema? ¿Por qué no funcionaba?

Sí, funcionaba. Las dos instrucciones (de la Congregación para la Doctrina de la Fe publicadas en los años 90) no rechazaron la Teología de la Liberación. Esa etapa de la historia estaba muy presente el comunismo soviético y existían tantas presiones de esa ideología. Cuando nosotros hablamos de los pobres lo hacemos de una manera muy distinta a los comunistas. No soñamos un paraíso terreno. Ellos reclamaron siempre a la Iglesia que el cristianismo habla sólo del cielo, pero nosotros no podemos decir que hablaremos sólo de la tierra. El hombre es un ser que vive en este mundo, pero tiene al mismo tiempo una vocación universal, eterna, divina. Debemos integrar la responsabilidad aquí por la sociedad, la justicia social, la paz, el sostener siempre la dignidad humana, con la visión trascendente.

Esta es la tarea de la Iglesia de hoy, de introducirse en la agenda de la sociedad moderna y, al mismo tiempo, decir que el fin último es Dios. Es malo cuando se olvida este último fin del hombre. No podemos argumentar contra la dignidad humana porque no sólo los ricos, los poderosos, no deben suprimir los pobres, explotar a los enfermos menos poderosos, sólo con la referencia a Dios podemos hablar de la igualdad, la equidad de los hombres.

¿Entonces la Teología de la Liberación está ya purificada de cualquier influencia negativa?

Purificada no, se ha aclarado. También en otras etapas de la historia de la Iglesia existían discusiones sobre los nuevos desafíos. Nosotros somos hombres, debemos discutir, encaramos el diálogo y a veces hasta peleamos de una manera fraterna. Pero no se pueden hacer guerras, uno contra el otro. Siempre debe ser una discusión seria, porque existen diversas perspectivas de un tema pero todos bebemos de la fuente de la doctrina de la Iglesia. La teología es necesaria para el desarrollo, para la actualización de la doctrina de la Iglesia que como tal es siempre la misma.

¿Su libro pretende ser un ejercicio definitivo de explicación, de “normalización”?

Si, los libros tienen también la tarea de superar algunos prejuicios o la falta de información. Muchos prejuicios vienen de una falta de comunicación, cuando la gente habla muy superficialmente o con palabras muy ligeras, prejuiciosas. Esto es necesario también para el estudio, el conocimiento y para buscar un buen juicio.

¿Cómo ha sido su relación con Gustavo Gutiérrez?

Cuando yo comencé como teólogo él ya había terminado. Ha sido una relación mutua, yo he aprendido mucho de él, hemos discutido mucho los puntos problemáticos de la Teología de la Liberación.

¿Los tiempos están maduros para la beatificación de Monseñor Romero?

La Congregación para las Causas de los Santos tiene la responsabilidad pero toca a nosotros dar el “nihil obstat” (visto bueno) porque nada en este obispo está en contra de la ortodoxia. Hemos leído, estudiado todos sus escritos, sus libros y homilías, estamos convencidos de manera unánime que no existe objeción alguna en la doctrina. Este es el juicio de nuestra congregación, el resto debe continuar en los Santos.


Entradas Relacionadas: Fundador de la teología de la liberación en presentación de libro del Card. Müller en el Vaticano.

Texto de la carta en la cual Benedito XVI explica la validez de su renuncia

Andrea Tornelli publica hoy en su blog el texto de la carta que Benedito XVI le envió el pasado Feb-18-2014, en la cual explica la validez de su renuncia.

Como se recordará, en el día de ayer, el periódico La Stampa publicó un artículo de primera página basado en es esta carta (ver aquí). Tornelli había enviado por escrito tres preguntas al Pontífice emérito vistas las especulaciones planteadas por Antonio Socci sobre la validez de la renuncia de Benedicto XVI.

Esta es una traducción adapta del texto transcrito por Tornielli.

Ciudad del Vaticano
18-2-2014
Respetado Señor

Sr. Andrea TORNIELLI
Via (...)
(...) MILÁN

Estimado Señor Tornielli,

¡Gracias por su carta del 16 de febrero! A sus tres preguntas respondo así:

1) No hay la menor duda acerca de la validez de mi renuncia al ministerio petrino. La única condición de la validez es la plena libertad de la decisión. Especulaciones sobre la invalidez de la renuncia son simplemente absurdas.

2) El mantenimiento del hábito blanco y del nombre Benedicto es una cosa simplemente práctica. En el momento de la renuncia no había a disposición otras prendas de vestir. Además llevo el hábito blanco en modo claramente distinta de el del Papa. También aquí se trata de especulaciones sin el mínimo fundamento.

3) El prof. Küng ha citado literalmente y correctamente las palabras de mi carta enviada a él.

Espero haber respondido en modo claro y suficiente a sus preguntas.

Suyo en el Señor

Benedicto XVI