Después del reciente —y único— encuentro del Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, Card. Gerhard Ludwig Müller, y el Superior General de la FSSPX/SSPX, Bernard Fellay, se dió a conocer un comunicado en el cual se decía que el mismo había transcurrido “en un clima de cordialidad” para posteriormente afirmar que “se ha acordado proceder gradualmente y dentro de un tiempo razonable para superar las dificultades y alcanzar la deseada reconciliación plena”.
Más recientemente el Secretario dela Pontificia Comisión «Ecclesia Dei», Mons. Guido Pozzo, en entrevista con la revista francesa Famille Chrétienne (publicada en el sitio de internet del Distrito Francés de la FSSPX/SSPX), había mostrado una posición más o menos de puertas abiertas.
Ahora, acorde con esas política y “clima de cordialidad”, el obispo de Albano-Laziale (diócesis casi en las barbas del Papa, por decir lo menos), Mons. Marcello Semeraro, secretario del grupo de ocho —ahora nueve— cardenales elegidos por Francisco para que lo ayuden en la reforma de la Curia, ha emitido una notificación con fecha Oct-14-2014, en la cual, y respecto de la FSSPX/SSPX, la cual tiene la sede de su Distrito italiano justamente en Albano-Laziale, ha considerado adecuado:
...Reafirmar que la «fraternidad» no es una institución (o parroquia, o asociación) de la Iglesia católica.
Luego de citar la carta de Benedicto XVI a los obispos sobre la remisión de la excomunión de los obispos de la FSSPX/SSPX de Mar-10-2009 y el Motu Proprio Ecclesiæ Unitatem, Mons. Semeraro pasa a citar textualmente una notificación de su obispo antecesor, Dante Bernini.
Los fieles católicos no pueden participar en la Misa, ni solicitar y/o recibir sacramentos de la ó en la Fraternidad. Hacer lo contrario significaría romper la comunión con la Iglesia católica.
Por lo tanto, cualquier católico que solicita y recibe los Sacramentos en la Fraternidad San Pío X que se pondrá de hecho en la condición de no estar en comunión con la Iglesia Católica. Una readmisión en la Iglesia Católica deberá ir precedida de un adecuado camino personal de reconciliación, según la disciplina eclesiástica establecida por el Obispo.
Finalmente encomienda a los párrocos brindar la respectiva información a los fieles.
¿Sobredosis de misericordina?